Fraga asegura que "sobran candidatos" para su sucesión
Pérez Touriño promete una oposición "abierta e integradora".- Zapatero afirma que es absurdo hacer una lectura nacional de los resultados en Galicia
El ganador de las elecciones gallegas, Manuel Fraga, ha intentado restar importancia al problema de su sucesión, que presidió su tercera legislatura y que, tras la nueva victoria por mayoría, vuelve a planear sobre el PP. Fraga ha asegurado en el programa Hoy por Hoy de la Cadena Ser que "sobran candidatos" para su sucesión, pero que ninguno "está dando problemas". El eterno candidato del PP será presidente de la Xunta con tres escaños por encima de la mayoría absoluta, 41, uno menos que en el 97. El PSOE, único partido que gana votantes, pasa de 15 a 17, mientras que el BNG pierde uno y se queda en 17.
Fraga, que ha madrugado para atender a los periodistas el día de la resaca electoral, ha explicado en el programa de Iñaki Gabilindo que si el PP ha puesto encima de la mesa "1.000 propuestas" en la campaña, espera que "se cumplan 999".
En declaraciones a Radio Nacional, ha indicado que su victoria es "un honor y una obligación", por lo que ya está haciendo lo que sabe hacer y lo que le enseñaron sus padres: "trabajar". En el transcurso de la mañana, Fraga se ha reunido con sus conselleiros para analizar los resultados electorales.
El presidente en funciones de la Xunta ha añadido que ofrecerá diálogo y consenso a las otras fuerzas políticas. En este sentido, ha asegurado que ya está olvidado que el candidato del BNG, José Manuel Beiras, no le llamó para felicitarle y dijera que es un tramposo, y ha insistido en que "es posible una política de diálogo y de consenso en lo esencial".
Por su parte, el candidato del PSdeG, Emilio Pérez Touriño, ha declarado esta mañana que los "magníficos" resultados obtenidos ayer "marcan la tendencia de un partido que ha hecho los deberes" y que ha demostrado que "es un partido estable y cohesionado, con objetivos, con rumbo, con liderazgo".
Tras felicitar a Fraga por su triunfo, ha indicado que el PSOE es el único partido que ha conseguido aumentar en votos y escaños "de una forma muy importante" y ha anunciado que ahora se dedicará a "hacer una oposición abierta, constructiva, integradora", "generando alternativa, generando ilusión".
Este mediodía se han reunido las ejecutivas del PSOE y del PP para analizar los resultados electorales. El secretario general del PP, Javier Arenas, ha expuesto ya algunas de las conclusiones a las que ha llegado la dirección de su partido. Según Arenas, los resultados de los comicios, como los anteriores en el País Vasco, demuestran que el PSOE no es una alternativa de Gobierno en España.
"Un paso tranquilo hacia delante"
Desde el PSOE, su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, ha afirmado que Pérez Touriño se ha consolidado como alternativa al PP en Galicia, y ha añadido que los resultados electorales han sido "un paso adelante prudente" para el PSdeG, pero "sin ninguna tentación al optimismo absurdo".
Además, Zapatero ha querido desligar los resultados gallegos de los objetivos que se ha marcado el partido en ámbito nacional y ha afirmado que "las elecciones gallegas no tienen ninguna lectura nacional, pero no sé por qué el PP se empeña tanto en querer hacer esta tarea".
Preguntado tras la reunión de la Ejecutiva Federal de su partido sobre si el efecto Zapatero ha influido en los resultados, el líder del PSOE ha indicado que estas son cosas más propias de los analistas, y ha precisado que el aumento de voto se ha debido a los socialistas gallegos, a los electores y a Pérez Touriño.
Para el secretario general de los socialistas, el candidato de su partido en Galicia ha puesto de manifiesto "sus cualidades" para ser en un futuro el presidente de la Xunta de Galicia. "Nos hubiera gustado dar un gran salto, pero sin duda se trata de un paso tranquilo adelante, prudente, pero en la buena dirección", ha indicado.
Pendiente el voto emigrante
A falta del escrutinio de los 60.000 votos emitidos por los emigrantes, los resultados oficiales difundidos por el Gobierno gallego (con el 100% escrutado) confirman la mayoría absoluta del PP que, con el 51% de los sufragios, obtiene 41 escaños en la Cámara autonómica. Fraga afrontará pues su cuarta legislatura consecutiva de hegemonía aunque con un retroceso de un representante.
El Bloque Nacionalista Galego (BNG) obtiene un 23,3% de los votos y pasa de 18 diputados a 17, la misma representación que obtiene el PSdG-PSOE, que alcanza el 21,9% de respaldo y suma dos escaños a los 15 que poseía.
Los socialistas son la única formación que logra incrementar su representación en el Parlamento gallego. El PSdG ha conseguido los dos nuevos diputados en las provincias de A Coruña y Pontevedra en detrimento de PP y BNG respectivamente.
El nuevo dibujo del Parlamento gallego evidencia el primer crecimiento de los socialistas después de 11 años de imparable declive, los mismos que lleva Manuel Fraga al frente de la Presidencia de la Xunta. El avance de la formación liderada por Emilio Pérez Touriño, uno de los dirigentes más identificados con el nuevo grupo de poder en Ferraz, también supone un espaldarazo a la labor de oposición del secretario general del PSOE, José Luis Rodruiguez Zapatero.
El incremento en escaños del PSdG también pone en duda si el BNG sigue siendo la alternativa más sólida al poder de Fraga. La formación nacionalista de Xosé Manuel Beiras, que pierde un representante respecto a las elecciones de 1997, tendrá los mismos diputados que los socialistas en el nuevo Parlamento y, como muchos analistas y sus mismos rivales sostienen, su particular fórmula de nacionalismo escorado a la izquierda se estanca justo cuando los dirigientes del BNG confiaban en lograr mayor representación en el Parlamento.
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