Una mujer muerta y un niño herido grave tras la explosión de un 'juguete trampa'
Según el Departamento vasco de Interior, el 'cochecito' contenía "probablemente pólvora" suficiente para provocar importantes lesiones
El coche de modelismo, de unos diez centímetros de longitud, había sido manipulado y tenía en su interior un cartucho con pólvora y una pieza parecida a una bujía, cuya función no se conoce con exactitud.
Al parecer, el sistema estaría pensado para que la pólvora deflagrara cuando el cochecillo chocara contra algún obstáculo. El artefacto no tenía ningún mecanismo de activación a distancia.
Según ha informado el Departamento vasco de Interior en un comunicado se trataría de un "juguete trampa" que contenía una cantidad pequeña de explosivo "probablemente pólvora" suficiente para provocar importantes lesiones a uno de los niños y la muerte de la mujer, al ser alcanzada en una arteria por una esquirla del cilindro que contenía el explosivo.
El sistema estaría pensado para que la pólvora deflagrara cuando el 'cochecito' chocara contra algún obstáculo
Uno de los pequeños, de 16 meses, se encuentra en estado grave
La Ertzaintza, no obstante, no descarta ninguna hipótesis, pero "elementos de análisis como la naturaleza y características del propio artefacto o la forma en la que éste habría sido depositado -abandonado en los servicios de un establecimiento hostelero y sin un destinatario señalado- no apuntan en principio necesariamente hacia los sectores que en los últimos tiempos promueven la violencia y el terrorismo en Euskadi".
La nota de Interior precisa que "todas las líneas de investigación" para localizar a los autores de este "hecho criminal" continúan "abiertas en estos momentos" y solicita la colaboración de aquellos ciudadanos que puedan aportar información sobre el caso.
Relato de los hechos
La deflagración se registró sobre las once menos cuarto de la mañana en la calle Aldamar, esquina calle Euskal Herria, en pleno centro de San Sebastián y junto a la parte vieja donostiarra.
En el momento de explosión, ocurrida en un vehículo marca Opel Corsa, de color blanco y con matricula SS-4231-AM, cinco personas de la misma familia se encontraban en el interior: la tía conducía el coche, la madre era la copiloto y, en los asientos traseros, viajaban la abuela y los dos nietos, de 2 y 4 años.
La mujer falleció prácticamente en el acto -efectivos sanitarios han informado de que no pudieron hacer nada por su vida- mientras que el pequeño sufrió heridas de carácter grave en la cara, por lo que fue trasladado al hospital de Nuestra Señora de Aranzazu, donde ha sido operado y se encuentra en estado "muy grave".
Junto al pequeño, ingresó también su hermano, P.G.C., de cuatro años, que tenía erosiones superficiales en mano, hemitórax y pabellón auricular izquierdo, y fue dado de alta tras ser atendido.
Minutos después de la una de la tarde, el vehículo de la funeraria ha trasladado el cuerpo sin vida de la víctima para realizarle la autopsia, después de que el juez ordenara el levantamiento del cadáver.
Un 'juguete' abandonado el sábado
Según ha informado el Departamento de Interior vasco, el cochecito fue abandonado junto a una jirafa de juguete el pasado sábado en el bar Txioka, situado en una zona petonal del caso viejo de la capital donostiarra.
Los juguetes no habían sido reclamados por nadie hasta hoy, por lo que los propietarios del bar han decidido regalarlos.
