Yolanda Díaz rechaza congelar el salario mínimo en 2021
“No se entendería que subiéramos las pensiones y los sueldos de los funcionarios y no el de los trabajadores que más lo necesitan”, ha esgrimido la ministra de Trabajo
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, rechaza que el salario mínimo interprofesional se quede congelado en 2021. “No es compartido ni sería entendido por qué revalorizamos las pensiones y por qué revalorizamos los salarios de empleados públicos al 0,9 % e, insisto, por qué dejamos a los asalariados que más lo necesitan con una pérdida de poder adquisitivo”, ha declarado en una entrevista en TVE este viernes.
“No voy a dar la cantidad porque me debo a la mesa de diálogo social; como todo, lo discutiremos y ojalá tengamos un acuerdo en esa mesa”, ha añadido. El martes el secretario de Estado, Joaquín Pérez Rey, se reunirá con los representantes de sindicatos y patronal para escuchar sus posiciones.
En Trabajo ya conocen estas posturas porque ha podido oírlas y leerlas en los últimos días. Los sindicatos son partidarios de subir el SMI este año. Entenderían que no fuera la subida de los últimos años, pero sí algo. Sin perder su objetivo de llegar al 60% del salario medio al final de la legislatura. En CEOE, al contrario. “Con la que está cayendo, no es momento”, ha dicho el presidente de la patronal, Antonio Garamendi.
Además del incremento de las retribuciones de funcionarios y pensionistas, Díaz ha puesto otros argumentos sobre la mesa. Ha explicado que en 42 años de democracia nunca se ha congelado el SMI, que solo se hizo durante los primeros años de Gobierno de Mariano Rajoy, en los peores momentos de la crisis anterior, cuando se optó por la devaluación salarial como mecanismo de recuperación de poder adquisitivo.
El otro elemento que ha esgrimido la titular de Trabajo es que otros países de la Unión Europea están elevando el suelo legal de los salarios. En Alemania, por ejemplo, se ha planteado un incremento del 2,67% en dos tramos, enero y julio. En Irlanda se llegaría al 1%.
En España la fijación del salario mínimo es competencia del Gobierno. Antes tiene que escuchar a los agentes sociales, pero no tiene por qué negociar con ellos. Después es el Ministerio de Trabajo el departamento que debe elevar la propuesta al Consejo de Ministros, pero es al órgano que corresponde la decisión final.
