El estudio de impacto ambiental lo hace tu hijo
La Fundación Endesa impulsa un concurso con casi 200 colegios para implicar al alumnado en el cuidado de su entorno
Son muchas las cosas que empiezan en el colegio: el amor por un deporte o una asignatura, aficiones como la lectura o el teatro, vocaciones como la danza, la música o la pintura. Surgen porque, de una manera u otra, los alumnos tienen la posibilidad de entrar en contacto con ellas, de interiorizarlas, de descubrirlas. Para que ocurra lo mismo con la educación ambiental, hoy son muchos los centros de enseñanza que impulsan iniciativas con las que enganchar a los estudiantes en el cuidado de la tierra. Algo fundamental, dicen los expertos, para que estos ciudadanos del futuro sepan qué achaques sufre su entorno y cómo pueden mejorarlo. También para que vayan poniéndole cara a su principal enfermedad: el cambio climático.
Una muestra son los 194 proyectos que han optado a los Premios Fundación Endesa a la Ecoinnovación Educativa, un certamen que reconoce las ideas de escolares de secundaria, bachillerato y formación profesional de grado medio de toda España. Agrupadas en tres categorías (¿Qué es para ti la naturaleza?, Mi solución creativa a un problema medioambiental y ¿Cómo mejorarías tu entorno?), las propuestas recibidas por Endesa hacen hincapié en la protección de la biodiversidad y atacan distintos frentes: reciclaje, contaminación, prevención del vertido de basuras, estudio y difusión de las especies autóctonas, huertos e invernaderos comunitarios... Los ganadores reciben entre 2.000 y 4.000 euros.
El ingenio de 194 ideas
¿Y qué iniciativas plantean los nueve premiados? Por ejemplo, los chicos del Colegio Humanitas de Tres Cantos (Madrid), ante la construcción de un embalse en su municipio, examinaron los impactos que podía conllevar y establecieron grupos de debate encarnando a ingenieros, arqueólogos y agricultores para emular una negociación real a favor y en contra de la intervención. También fue seleccionado el proyecto del Corazonistas la Mina (Zaragoza), en el que un grupo de alumnos rastreó la huella ambiental de su centro y, con la misión de reducirla, fueron incluyendo contenidos divulgativos y prácticos en distintas asignaturas para acometer el problema. Por su parte, el IES Luis Cobiella Cuevas (Santa Cruz de Tenerife) lucha contra la obsolescencia programada: sus estudiantes han llevado a cabo un estudio del reciclaje de móviles para averiguar cómo reducir los residuos electrónicos y han diseñado un prototipo longevo que se pueda renovar por partes.
Pero hay más ideas que relucen entre las premiadas y las presentadas: un análisis de la calidad del aire de la escuela para mejorar la concentración durante las clases (IES Matarraña, Zaragoza); un generador de energía limpia a partir de la lluvia (IES Martín Rivero, Málaga); un huerto comunitario en el que personas mayores y alumnos cultivan al alimón e intercambian conocimientos (INS Cap Norfeu, Girona); seguimientos del anfibio gallipato (Ave María Casa Madre, Granada) y el vencejo pálido (Colegio María Medianera Universal, Cádiz)... Incluso un macroplan para ahorrar energía y agua materializado en un tríptico que el colegio Sagrado Corazón Anunciata ha repartido por la ciudad de Valladolid.
Naturaleza, el salón de la casa
Uno de los fines de este concurso es potenciar la conciencia ambiental entre la ciudadanía. Un asunto que urge, según estudios como el Ecobarómetro de Endesa, una encuesta que evalúa el grado de cultura ecológica que tiene cada ciudadano. El estudio, hecho sobre dos muestras de 1.000 personas (una de edades entre 18 y 35 años y otra entre 18 y 75 años), evalúa el conjunto de hábitos y preocupaciones relacionadas con la naturaleza que cada uno tiene.
El documento indica, entre otras cosas, que el 54% de los encuestados del grupo más joven encuentra que el volumen de contenidos ambientales impartidos en edad escolar es insuficiente. Además, un 57% se siente muy poco informado sobre cuestiones verdes, siendo estas una de las últimas preocupaciones de los consultados cuando se les pregunta por los problemas actuales; si bien, como asunto aislado, más del 95% lo consideran algo muy grave. La síntesis del barómetro es que esta conciencia aún está lejos de haber calado en jóvenes y adultos. ¿La solución? Una mejor y más amplia educación ambiental para que todos los ciudadanos sientan la naturaleza tan suya como el propio salón de su casa.
Por un océano sano
"Si no puedes reusarlo, rehúsalo" es el lema del Día Mundial del Medio Ambiente de 2018. La frase habla de la basura que intoxica el mar, un fenómeno que supone el vertido de 200 kilos de plástico al segundo y que amenaza a más de 300 especies, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Combatirlo pasa por reducir el consumo, reciclar y adoptar una economía circular, valores que los participantes en los Premios han desarrollado en sus ideas y que la compañía matriz atesora en su política ambiental. Endesa se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible en el uso de los recursos, la reutilización y el control de la huella ecológica. Ejemplos de ello son su plan de biodiversidad, que en 2017 registró 25 acciones de conservación, o la construcción de un parque de arrecifes artificiales en una antigua central térmica en Sant Adrià de Besòs.