Uber se hará cargo de los recursos de las multas a sus conductores

Uber se prepara para tiempos más duros para su negocio en España. La empresa de transporte entre particulares se hará cargo de los eventuales recursos que sus usuarios tendrán que afrontar si reciben multas, según confirmó este miércoles la firma. “Hemos recibido un comunicado de la compañía en el que nos asegura que todo sigue igual, que el juez ha estimado una demanda que no tiene base legal y que nos ofrecen su ayuda”, explicó el miércoles durante un viaje un conductor que quiso mantener el anonimato. Una versión que también confirmó la empresa, que añadió que apoyará a sus usuarios como siempre ha hecho. Hasta ahora Uber ha recibido 56 multas en Cataluña (28 a los conductores y 28 directamente a la empresa), de las que recurrió dos, mientras en Madrid hay 25 expedientes abiertos.

José Andrés Díez, abogado de la Asociación Madrileña del Taxi —el gremio que puso la demanda—, aseguró que el miércoles por la mañana depositó el aval de 10.000 euros necesario para que las medidas se hagan efectivas, y que está a la espera de la documentación necesaria para notificarlo al juez. Mientras tanto, sin embargo, Uber sigue funcionando y cobrando sus viajes sin problemas.

Redes de pago

Visa, una de las firmas a la que el juez requirió suspender todas las operaciones de pago relativas a Uber, se limitó a declarar que recibió la notificación y que su departamento legal está estudiando la medida. Alfonso de la Viuda, director general de la red de pago 4B, que también recibió la petición del juez, explicó que actuará cuando le llegue la documentación, aunque aún no sabe cómo: “No conocemos la estructura financiera de Uber, pero es muy probable que el banco con el que trabajan no tenga su sede en España, y que por ende nada o solo una parte de sus cobros pase por nuestras redes”.

Mientras tanto, la Comisión Europea avisó a las autoridades españolas de que las medidas para regular el funcionamiento de Uber deben respetar los principios de proporcionalidad, no discriminación y libertad de establecimiento. “Es importante no prohibir completamente nuevas tecnologías solo porque son nuevas, aunque somos conscientes de que deben cumplir las regulaciones de los Estados miembros”, declaró el portavoz de Transportes del Ejecutivo comunitario, Jakub Adamowicz.