Protestas de transportistas dejan ocho heridos en la ciudad colombiana de Cali

Al menos ocho personas heridas, una de ellas de gravedad, 70 vehículos afectados y media docena de vuelos comerciales cancelados dejó hoy una protesta de transportistas, que con sus vehículos, bloquearon las principales entradas de la ciudad colombiana de Cali, informaron fuentes oficiales.

El Defensor Regional del Pueblo, Carlos Hernán Rodríguez, dijo a Efe, que un hombre fue internado en un hospital con una herida de bala en la cabeza, que lo mantiene en estado de coma.

Agregó que los heridos, según una información que le han entregado varias fuentes, se produjeron por enfrentamientos entre miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía y conductores que participaron en la protesta indefinida, convocada para presionar y lograr mejores condiciones de trabajo y financieras.

Cali, la tercera ciudad en importancia de Colombia, tuvo un día caótico por los taponamientos realizados por miembros del gremio de transporte público, que atravesaron sus vehículos en las principales entradas de la ciudad.

Las protestas obligaron a varias aerolíneas a cancelar al menos seis vuelos comerciales, porque sus pasajeros no pudieron llegar a tiempo al aeropuerto internacional Alfonso Bonilla Aragón, localizado en el municipio de Palmira, cercano a Cali, capital del departamento del Valle del Cauca (suroeste).

Para evitar más trastornos a los viajeros, la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) creó un "puente aéreo" entre el aeropuerto y la Base Aérea Marco Fidel Suárez, mediante el cual transportó a decenas de pasajeros y personal de esa terminal.

El alcalde de Cali, Rodrigo Guerrero, llamó a la tranquilidad a los transportistas ante los inconvenientes que han generado para la movilidad de los caleños.

Por su lado, el gobernador del Valle del Cauca, Ubeimar Delgado, también llamó a la cordura, al tiempo que informó que 50 autobuses articulados del sistema integrado de transporte "resultaron con daños considerables".

Los transportistas piden que los dejen crear empresas, y que sean integradas al sistema masivo de transporte, que les paguen un precio justo por cada vehículo viejo sacado de circulación, y que en sectores de montaña puedan operar todoterrenos, porque son la única alternativa que tiene la gente de esas zonas para movilizarse.