Emprendiendo en divisas en la City

Juan Lobato fue profesor de Salvador García en la Universidad de Londres. Poco a poco surgió la amistad entre ellos. Luego, entre charlas, cafés y cervezas en los pubs de la londinense calle de Ebury Road, decidieron poner en marcha un proyecto empresarial común. Era el año 2009 y se trataba, según explica Juan Lobato desde el otro lado de la línea telefónica, de una novedosa fórmula empresarial: “Vimos que podíamos montar algo en el ámbito del cambio de divisas y pagos internacionales, de manera que pudiéramos ayudar a las empresas en sus procesos de internacionalización”.

Así, en homenaje a la calle en la que se había fraguado, decidieron llamar a su compañía Ebury Partners. Todo un éxito empresarial, si se tiene en cuenta que la firma tiene más de 80 empleados; cuenta con más de 5.000 clientes y prevén, en el horizonte de 2016, alcanzar una cifra de negocio de 2.300 millones de euros.

Emprendedores ambos, “en mi caso, antes de Ebury Partners, ya había montado Beam.tv, una empresa dedicada a la digitalización de anuncios publicitarios, y Basekit, una plataforma tecnológica al servicio de empresas de hosting”, dice Lobato, que reconoce que emprender es una opción de vida “con muchos obstáculos” para la que él siempre se ha sentido especialmente preparado. “Emprender te permite poner en juego tus propias ideas. También creas empleo y generas recursos para nuevos proyectos. O sea, que, además de generar tu propio puesto de trabajo, cumples con un fin social y aportas valor a la sociedad. ¿Qué más se puede pedir?”.

Una vez que los dos socios decidieron poner en pie Ebury Partners, el siguiente paso fue conseguirlo. Lobato reconoce que en Reino Unido encontraron un entorno más propicio del que habrían encontrado en España de haberse planteado constituir la compañía aquí. “En apenas dos días teníamos resueltos todos los trámites burocráticos”, dice. Después de pasar un año desarrollando el modelo de negocio, hubo que buscar financiación. “El primer millón de euros lo pusimos entre Salvador y yo. Luego, dos años después de fundar la compañía, abrimos una ronda de financiación en la que varios business angel invirtieron 2,6 millones de euros. Además, el Gobierno británico aportó otro millón”, explica.

“El nacimiento de Ebury Partners como empresa coincidió con la liberalización de los servicios de pago en la Unión Europea. Hasta entonces, este era un servicio que tan solo podían dar los bancos. Nosotros vimos que, sin ser un banco, podíamos ofrecer sus mismos servicios a un precio más razonable”, sostiene Lobato. De esta manera, en la empresa fundada por los dos emprendedores españoles comenzaron a ofrecer, “a compañías que realizan sus transacciones comerciales fuera de la zona euro”, desde operaciones de intercambio de divisa y pagos internacionales hasta servicios de gestión del riesgo a través de seguros de tipo de cambio y órdenes de mercado ejecutables las 24 horas del día. “Operamos en más de cien divisas diferentes y trabajamos con más de 1.000 empresas europeas. De ellas, aproximadamente un centenar son españolas”, señala.

Los socios fundadores de Ebury Partners, además de dominar el mercado de las finanzas, son expertos en últimas tecnologías. Así, sobre el porqué Ebury Partners decidió desarrollar su plataforma en el Parque Tecnológico de Málaga, Juan Lobato expone tres distintas razones: “Encontramos gente muy preparada, el aeropuerto tiene muchas conexiones con Londres, algo muy conveniente, y además allí viven muchas segundas generaciones de ingleses, por lo que puedes contar con un personal perfectamente bilingüe”.

De esa forma, es probable que en Málaga (“si todo va bien”) haya en dos años 100 personas trabajando para esta pujante empresa nacida de los cafés que dos cerebros fugados se tomaban en Londres.