Los precios de la vivienda en China siguen su escalada en agosto

Los precios de la vivienda, tanto de nueva construcción como de segunda mano, siguieron subiendo en el mes de agosto en la mayoría de ciudades chinas comparado con el mismo periodo del año anterior, según publica hoy el Buró Nacional de Estadísticas chino (NBS).

De las 70 principales ciudades estudiadas por el NBS, 69 registraron un repunte interanual de los precios en agosto en viviendas comerciales de nueva construcción -se excluyen las de protección oficial-, la misma cifra que la registrada los tres meses anteriores (julio, junio y mayo) y ligeramente superior a la de abril (68 de 70).

Respecto a viviendas antiguas, las cifras muestran que 68 urbes vieron crecer los costes, por encima de las 67 que vieron aumentados los precios en este tipo de inmuebles en julio.

El Gobierno chino no ofrece una cifra ni un porcentaje global de variación de precios para el conjunto del mercado inmobiliario del país, sino que constata solamente los cambios interanuales e intermensuales de las setenta principales ciudades.

Comparado con el mes anterior (julio), 66 de las ciudades estudiadas constataron una subida del precio de la viviendas de nueva construcción en agosto, por encima de las 62 registradas en julio, mientras 58 reportaron un incremento en el coste de los inmuebles de segunda mano, una más que el mes anterior.

Las crecidas registradas en las ciudades más importantes de China fueron significativamente más altas comparadas con el aumento de los precios en urbes de segundo y tercer nivel, según destaca el NBS.

Mientras en Pekín, Shanghái, Cantón o Shenzhen, las subidas registradas en vivienda nuevas se situaron del 18 al 20 por ciento interanual; en otras ciudades de menor relevancia, el incremento no sobrepasó al 6 por ciento.

La información publicada por el NBS muestra datos de grandes ciudades de China, como Pekín o Shanghái, pero también de capitales provinciales y otras urbes de menor rango.

Este es el octavo mes consecutivo en el que sube el precio de la vivienda en China, a pesar de las medidas impulsadas por el Ejecutivo para enfriar el sector en el mes de marzo.

Tras años de subidas importantes, el mercado inmobiliario chino se enfrió ligeramente a partir de 2010 tras la implementación de varias restricciones a las compras, como el aumento del pago inicial o las limitaciones para adquirir una tercera residencia.

Sin embargo, el sector volvió a activarse el año pasado, cuando Pekín introdujo varias medidas para impulsar el crecimiento económico, entre ellas la bajada, en dos ocasiones, de los tipos de interés del país.

Ante tal crecimiento, el Consejo de Estado anunció en marzo nuevas reglas que afectan al mercado inmobiliario del país, entre ellas la creación de un tributo que pagan los vendedores y que supone hasta el 20 por ciento de las ganancias obtenidas por la transacción.

Por el momento, no obstante, las medidas aplicadas no se han traducido en un descenso o enfriamiento claro del mercado inmobiliario del país, como constatan las cifras publicadas hoy.