Con los bancos cerrados, Chipre se pregunta por el negro futuro de sus empresas
Con los bancos cerrados por undécimo día consecutivo y aún coleando las valoraciones del acuerdo con el Eurogrupo, los chipriotas han comenzado a preguntarse si la reestructuración de la banca y los depósitos permitirá sobrevivir a sus empresas.
Muchas compañías del país poseen cuentas bancarias en las dos principales entidades financieras del país, el Banco de Chipre y el Banco Popular (Laiki), cuyos depósitos por encima de 100.000 euros perderán un 40 % de su valor en el primer caso y probablemente la totalidad en el segundo.
En cualquier caso, los grandes depósitos de ambas entidades financieras quedarán congelados por un periodo indeterminado de tiempo hasta que el Banco de Chipre acometa su reestructuración y el Popular su liquidación.
"100.000 euros puede ser una cantidad grande para una sola persona, pero para una empresa es normal tener 100.000, 200.000 o 300.000 euros en un banco, para poder gestionar su negocio", se quejaba Nikos Omiros, propietario de un pequeño supermercado.
El acuerdo firmado por el Gobierno chipriota y el Eurogrupo "destruirá" el sector financiero de Chipre y "hundirá al país en la recesión", consideró el Premio Nobel de Economía 2010, Christopher A. Pissaridis, en una entrevista con Efe.
Las empresas recibirán un severo golpe puesto que no sólo sus potenciales consumidores han perdido mucho dinero -por ejemplo, el sector inmobiliario quedará parado- sino que las propias compañías verán sus cuentas congeladas y muchas se verán abocadas al cierre, añadió el economista.
Es la misma visión pesimista de Vajira Lalit, originario de Sri Lanka y que lleva doce años en Chipre, donde gestiona una pequeña empresa de envíos de dinero.
"Vamos a perder unos 75.000 euros. Eso es lo que calculo yo, porque nadie nos ha informado de nada. Probablemente tengamos que cerrar", lamentó.
Hoy, en una carta al Ministerio de Trabajo, el secretario general de la asociación de pequeñas y medianas empresas POVEK, Stefanos Kursaris, urgió al Gobierno a tomar una serie de medidas para ayudar a que las empresas no vayan a la quiebra.
Esta organización considera que lo que está sucediendo en Chipre cambiará completamente la cara del mundo empresarial chipriota y teme el cierre de miles de compañías.
Pero la quita a la que se verán sometidos los depósitos también afecta a otras instituciones, como las educativas.
La Universidad de Chipre tenía fondos de 20 millones de euros depositados en el Laiki y otros 10 millones en el Banco de Chipre para su funcionamiento y unas obras que se están haciendo.
"Los depósitos en el Laiki quedarán congelados durante cinco años y luego se calcula que podrá recuperar sólo el 20 %, mientras que se está negociando qué ocurrirá con los del Banco de Chipre", explicó Pissaridis, quien añadió que parte de ese dinero era para proyectos de investigación financiados por la propia UE.
Hoy también tuvo lugar la primera gran manifestación contra la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) desde el inicio de la crisis bancaria en Chipre y fue protagonizada por los estudiantes, que recorrieron las calles de Nicosia exigiendo que no se hipoteque su futuro.
"Tenemos miedo de que a nuestras familias no les quede dinero para nuestros estudios universitarios", aseguraba Marios, uno de los participantes.
Irini y Kristal, de 19 años, explicaron a Efe que, "por culpa de la troika y del Gobierno, que ha aceptado sus exigencias", temen por su futuro, ya que no saben si cuando terminen sus estudios podrán optar a un puesto de trabajo o si tendrán dinero después de la quita parcial de depósitos.
Por otro lado, el gobernador del Banco Central, Panikos Dimitriadis, dijo hoy ante la prensa que "se están haciendo esfuerzos enormes para que los bancos abran el próximo jueves".
Dimitriadis, que ha estado estos días en el ojo de las críticas por su gestión de la crisis, recalcó que las restricciones en el movimiento de capitales serán temporales, si bien no especificó qué tipo de limitaciones habrá.
Por si fuera poco, la anunciada reestructuración del sistema bancario chipriota provocó hoy que la agencia de calificación Fitch pusiese en situación de bancarrota al Banco Popular y de quiebra limitada al Banco de Chipre, además de mantener la perspectiva negativa para el tercer banco chipriota, el Banco Heleno (Hellenic Bank).
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.