Mas de 100 manifestaciones en Italia por los paros parciales generales
Decenas de miles de trabajadores salieron a las calles en las más de cien manifestaciones que fueron convocadas hoy por el sindicato mayoritario, la Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), en Italia con motivo de la jornada de protestas en Europa por las políticas de austeridad.
A la convocatoria se han sumando también los estudiantes en varias manifestaciones contra los recortes en educación y en algunas ciudades como Roma, Milán y Turín se vivieron fuertes enfrentamientos con la policía que han dejado varios heridos leves entre las fuerzas del orden.
Los sindicatos no han dado por el momento datos del seguimiento del paro general que en el sector privado era de cuatro horas al igual que para el transporte ferroviario y el naval.
Mientras que en el sector público el paro fue convocado para toda la jornada, aunque se excluyó el transporte aéreo y el transporte público local.
En Turín, concretamente, los estudiantes han entrado en el interior del edifico de la banca Intesa Sanpaolo y en la oficina del Fisco, donde han quemado documentos, lo que ha llevado a la policía a utilizar gas lacrimógeno para disuadir a los manifestantes.
Asimismo, los agentes han cargado contra los estudiantes en Milán y Brescia, en la región norteña de Lombardía, donde según los medios italiano, en esta última ciudad la policía detuvo a tres estudiantes.
El epicentro simbólico de la huelga en Italia ha sido la ciudad de Terni, en la región de Umbria (centro), donde la secretaria general del CGIL, Susanna Camusso, ha encabezado la manifestación en la que reivindicó una respuesta por parte del gobierno "a la cara más débil del país".
"Hemos escogido estar en Terni porque es una ciudad símbolo de los problemas de la política europea. Una ciudad siderúrgica de siempre, con un importantísimo establecimiento productor de acero altamente cualificado, sobre la que se ha consumado una de las ejemplos de no capacidad solidaria Europa ", destacó Camusso.
En Terni se encuentra la fábrica de acero ThyssenKrupp, recientemente desmantelada y que ha dejado sin trabajo a cientos de trabajadores.
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