Brasil cancela un proyecto de tren ligero en el que se interesaba Francia

La obra formaba parte de los planes para mejorar el transporte en la capital brasileña con vistas al Mundial de fútbol de 2014, que tendrá a Brasilia como una de sus doce subsedes, y pretendía unir el aeropuerto con la zona hotelera, que se sitúa a unos 500 metros del estadio que se construye para ese evento.

Según fuentes oficiales, la decisión de cancelar definitivamente las obras fue tomada por el Gobierno regional de Brasilia, que la descartó tras comprobar que, debido a procesos que tramitan en la justicia sobre supuestas irregularidades, no estarían listas para el Mundial.

El proyecto, cuyo coste había sido calculado en 276,9 millones de reales (138,45 millones de dólares), contaba con apoyo del Banco Mundial y de la Agencia Francesa de Desarrollo, que en 2009 se comprometió a financiar buena parte de las obras.

Ese acuerdo con Francia se anunció el 7 de septiembre de 2009, en el marco de una visita al país del entonces presidente francés, Nicolás Sarkozy, quien ese mismo día recorrió una exposición en la que era exhibido un modelo de tren ligero que ofrecía una empresa francesa.

El proyecto, sin embargo, cayó en desgracia con una serie de denuncias de corrupción que afectaron al gobernador de Brasilia en la época, José Roberto Arruda, quien finalmente fue destituido por su supuesta responsabilidad en medio de un escándalo de sobornos.

El tren ligero de Brasilia es la primera de las obras que se cancela dentro del plan que el Gobierno se ha trazado para mejorar la infraestructura de las ciudades que serán sedes del Mundial de fútbol.