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AMANCIO ORTEGA

Busdongo (León) desempolva a su paisano, el tercer hombre más rico del mundo

El empresario español Amancio Ortega. EFE/Archivo
El empresario español Amancio Ortega. EFE/ArchivoEFE

El magnate textil nació en Busdongo hace 76 años, un pueblo con cerca de sesenta vecinos censados -aunque son muchos menos los que residen en invierno-, cercano a Asturias y cuyos vecinos defienden a capa y espada que casi nunca le han visto por allí.

"Nos tiene olvidados por completo", ha lamentado a Efe el vecino Saúl Jiménez, que durante los fines de semana trabaja en el bar del pueblo, "Casa Maragato", y quien lo único que puede decir es: "se sabe que nació aquí, pero nunca ha dado señales de vida".

Amancio Ortega dio sus primeros pasos en el seno de una familia humilde, entre los muros de una casa de alquiler que hoy está en ruinas.

Pudiera decirse que es leonés por casualidad, ya que si nació en esta provincia fue debido a que su padre, Amancio, ferroviario de profesión, fue trasladado allí por trabajo, según ha indicado a Efe en una conversación telefónica el alcalde pedáneo de este pueblo, José Gutiérrez.

Ortega fue bautizado en la iglesia del pueblo en 1936 y, preguntes al vecino que preguntes, -casi todos ellos prefieren quedar en el anonimato- nadie parece tener relación con el empresario ni con su familia, ya que fueron pocos años los que vivieron en este pueblo y en el que no conservan propiedades ni amistades.

Ahora, 76 años después del nacimiento del magnate y con motivo de su escalada al tercer puesto en la lista de los hombres más ricos del planeta, el alcalde pedáneo tiene en mente rendirle un homenaje.

Los actos los tiene planeados: una misa en su honor, un encuentro de pendones (tradicionales estandartes leoneses) e incluso la colocación de una placa en la fachada de la escuela del pueblo en homenaje al empresario, que hoy tiene en su haber una fortuna de 38.000 millones de euros.

Solo falta cerrar el asunto, mandarle la invitación y concretar su presencia, ha dicho Gutiérrez, que ha avanzado que si le lograsen hacer llegar al pueblo prepararían una tradicional caldereta de cordero y le convidarían a embutidos, ya que "a una mariscada él estará acostumbrado porque es rico y le sobra el lujo".

Busdongo es un pueblo al que no llega internet y que cuenta con unas treinta casas, la mitad deshabitadas, a poco más de cincuenta kilómetros al norte de la capital leonesa y a cuatro del límite con Asturias, en el puerto de Pajares.

Una vecina del pueblo, que como los demás no quiere desvelar su nombre, ha explicado que sus paisanos no tienen sentimientos "de aprecio ni desprecio" hacia él, porque le consideran "una persona ajena totalmente" a esta localidad.

Y es que "uno es de donde pace, no de donde nace", ha comentado esta vecina.

Aunque nadie parece haberle visto nunca por allí, otro vecino ha indicado que Ortega hizo una "visita fugaz" al lugar hace alrededor de 4 o 5 años.

En este lugar no falta quienes han mostrado su deseo de que el empresario instale un almacén o algo para que dé trabajo a los vecinos del pueblo o incluso que monte una fábrica de botones.

Considerado gallego, es hijo de los vallisoletanos Josefa Gaona y Amancio, este último ferroviario que trabajó en Busdongo en la época en la que nació su hijo, nadie se pone de acuerdo cuándo, si fueron unos meses o unos pocos años.

En Galicia Ortega fundó Inditex, que hoy cuenta con más de 3.000 tiendas de moda por todo el mundo y quien se convirtió el pasado 13 de junio en el más acaudalado de Europa, tras superar al sueco Ingvar Kamprad, dueño de Ikea, la mayor cadena de tiendas de muebles y complementos para el hogar del planeta, según el Índice de Millonarios de Bloomberg.

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