Las cajas vascas llegan a un acuerdo con Bildu para aprobar la fusión

Las direcciones de las tres cajas vascas, la vizcaína BBK, la guipuzcoana Kutxa y la alavesa Vital, han llegado a un acuerdo con la coalición abertzale Bildu para la aprobación del proyecto de fusión fría. Este acuerdo, adelantado por EL PAÍS el pasado domingo, garantiza el respaldo de los actuales representantes de la izquierda abertzale en las Asambleas de las tres cajas al proyecto de fusión.

La integración de las cajas vascas, con la creación de un banco (Kutxa Bank) para el negocio financiero, ya contaba con el respaldo del PNV, el PSE-EE y el PP, entre otras fuerzas, y tenía garantizado el respaldo suficiente en las Asambleas de BKK y Vital, pero no en la de Kutxa. Este acuerdo, que ha sido negociado directamente por los presidentes de las tres entidades y representantes de Bildu, da la seguridad de que le proyecto saldrá adelante con el apoyo suficiente en las tres instituciones.

El diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, ha asegurado en una rueda de prensa, junto al alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, que el acuerdo alcanzado no sólo "cierra las puertas a la privatización", sino que también"garantiza" el mantenimiento de la obra social. En concreto, bajo este concepto, se destinará el 30 % de los beneficios de forma permanente y no sólo los 3 años que estipulaba el acuerdo aprobado por los consejos de las tres cajas. Además, Garitano ha asegurado que "el nuevo banco respetará lo que los trabajaores decidan sobre el ámbito de su marco laboral". Bildu ha mostrado su "satisfacción" por el acuerdo de fusión de las tres cajas porque "garantiza demandas" que exigía la coalición abertzale "buenas para la ciudadanía".

"El patrimonio de las instituciones y la ciudadanía guipuzcoana no podía estar en manos privadas", ha señado Garitano. El diputado general de Gipuzkoa ha subrayado durante su intervención que la obra social ha sido uno de los ejes principales de la negociación y primoridal para mantenerla. "En el plan inicial solo se garantizaba para los próximos tres años y era indispensable mantenerla sin límites de tiempo".

Respecto a los trabajadores de Kutxa, la nueva entidad se compromete a aceptar la decisión de los empleados en aquello referente al ámbito de la negociación. "Si optan por un marco vasco en asuntos laborales la nueva entidad lo aceptará", ha explicado. Bldu cree que gracias a la capacidad demostrada para negociar la nueva entidad "ésta es mucho mejor que la planteada inicialmente y responderá de manera más adecuada a las necesidades de la ciudadanía". Garitano ha evitado realizar valoraciones sobre la postura de los sindicatos. A la pregunta de si ha habido contactos con Banatuz (plataforma de clientes de Kutxa afines a la izquierda abertzale) sobre la negociación y ver cuál será su actitud en la Asamblea, Garitano ha aclarado: "El proceso negociación ha sido discreto pero no secreto".

El Gobierno vasco, por su parte, considera que el acuerdo alcanzado entre Bildu y las tres entidades posibilitará el cierre definitivo del proceso de integración "sin sobresaltos y con el máximo consenso

antes de fin de año". "Parece que el tema se cierra, gracias a Dios", ha añadido y recordado que ayer hubo una reunión con la coalición abertzale, "de la que los responsables de las cajas salieron muy contentos y que abre totalmente las puertas a que haya un acuerdo global en el proceso de

integración de cajas".

La fusión se votará en las asambleas de BBK y Caja Vital el 16 de septiembre, y en la de la Kutxa el 23, antes de que se renueven estos organismos representativos, ya que su composición actual aún no refleja los resultados electorales de los comicios forales y municipales del pasado 22 de mayo.

Por este motivo, Bildu no dispone en la asamblea de Kutxa de la representación que actualmente ostenta en las instituciones de Gipuzkoa, territorio en la que la coalición logró la mayoría de los votos.

Las organizaciones afines a la coalición representan 24 votos en la asamblea de Kutxa: 20 de Banatuz, 3 de EA y 1 de LAB, ya que 2 de los 3 consejeros de Alternatiba se han dado de baja del partido y votarán a favor de la fusión, mientras que la tercera también podría apoyar el proceso.

La fusión ya contaba con el apoyo en Kutxa de 58 votos del PNV (24), PSE (18), Hamaikabat (13), PP (1) y 2 ex consejeros de Alternatiba y faltaba por concretar la posición de los 10 consejeros de CCOO, el sindicato mayoritario.

En las Asambleas de BBK y Vital la mayoría a favor de la integración es aplastante entre sus cien integrantes. Hasta ahora estaba garantizada, por lo menos, por los 75 votos que suman PNV (54), PSE-EE (20) y PP (1), a los que ahora se sumarán, como mínimo, los ocho de la izquierda abertzale.

En la Vital la suma de PNV (43), PSE (18) y PP+Plataforma Vital (19), garantiza también que el proyecto salga adelante.