General Motors dobla el beneficio trimestral hasta los 2.524 millones
Entre enero y junio la compañía ganó 5.387 millones, un 145% más que en el mismo periodo 2010.- La división europea empieza a recuperar el pulso
La diferencia que hace dos años. General Motors, que en verano de 2009 tuvo que pasar de forma urgente por el taller de la suspensión de pagos para evitar su colapso, acaba de cerrar el segundo trimestre con un beneficio neto de 2.524 millones de dólares. Es el doble de lo que ganó hace un año, lo que eleva el total para el primer semestre hasta los 5.387 millones.
Las resurrección del negocio en EE UU, concentrado desde la reestructuración en cuatro marcas -Cadillac, Buick, Chevrolet y GMC-, explica este sólido repunte en 2011. Y con estos beneficios, marca el sexto trimestre consecutivo con los números en verde. Los ingresos del grupo automotriz, el más grande de la tocada Detroit, creció un 19%, hasta los 39.400 millones.
Como explica Dan Akerson, su consejero delegado, ahora de sus cadenas de ensamblaje salen coches que quiere el consumidor, más eficientes, con un mejor diseño y de más calidad. Esos mismos resultados muestran que la división europea sigue teniendo dificultades, aunque empieza a recuperar el pulso con un beneficio de 102 millones, frente a unas pérdidas de 160 millones.
Akerson volvió a reiterar días atrás que no tiene intención alguna de desprenderse de la filial Opel. Y mirando al futuro a corto plazo, anticipó que los resultados globales del grupo serán "modestamente más bajos" que en el primer semestre, que subieron un 145% respecto a lo que ganó hace un año. La atención de la industria se centra ahora en la marcha de la economía.
De momento, las ventas de coches en EE UU se mantienen por encima de los 12 millones de unidades. Estos días también presentaros resultados sus otras dos rivales. Chrysler, que también tuvo que ser rescatada, anunció unas pérdidas de 370 millones por el coste de la devolución de la deuda al Tesoro de EE UU. Sus ventas subieron un 30% en un año, hasta los 13.700 millones.
Ford Motor, el segundo fabricante de Detroit, se anotó entre tanto un beneficio de 2.400 millones. Pero en su caso, cayeron un 8% respecto a hace un año, cuando sacaba tajada de la debilidad de sus rivales y de los problemas de Toyota con los aceleradores. Los ingresos rondaron los 35.500 millones, frente a los 28.100 millones del año precedente.
Kraft se parte en dos
También presentó resultados Kraft, que ganó 976 millones de dólares en el trimestre. Pero la compañía que dirige Irene Rosenfeld se guardó una sorpresa. El gigante alimentario, que tiene entre sus principales accionistas a Warren Buffett, se parte en dos divisiones, una dedicada a los aperitivos y otra que se concentrará en los productos ultramarinos -alimentos y bebidas- en la región de Norteamérica.
Los títulos de Kraft subieron un 3,5% tras el anuncio. La partición llevará un año completarla. Cada compañía cotizará entonces por separado. El negocio de aperitivos genera unos 32.000 millones en ventas anuales, por el tirón del consumo en los mercados emergentes. Recientemente, Kraft se hizo con marcas como la chocolatera británica Cadbury y compró las galletas LU a Danone.
Por su parte, el negocio de alimentos en EE UU, Canadá y México aporta unos ingresos anuales al grupo de 16.000 millones. Kraft es una de las marcas más reconocidas del poderío empresarial estadounidense, y entre sus productos más conocidos en este segmento destacan el café Maxwell y los postres de gelatina Jell-O, además de sus quesos en lonchas y mayonesas.
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