El juez confirma al presidente de Eulen al frente de Vega Sicilia

El Juzgado de lo Mercantil número 7 de Madrid ha declarado nula de pleno derecho la junta extraordinaria de El Enebro donde el presidente de Eulen, David Álvarez, fue destituido por cinco de sus siete hijos de su cargo de presidente de esta sociedad, propietaria de las Bodegas Vega Sicilia, según informa el empresario en un comunicado. Con esta decisión judicial, Álvarez da el último paso para recuperar el control sobre la compañía después de que sentencia anterior reconociese su mayoría en el consejo de administración de El Enebro.

En concreto, la nueva sentencia, dictada el pasado 13 de julio, declara nula la junta general extraordinaria de El Enebro, de fecha 18 de enero de 2010, así como todos los acuerdos adoptados por dicha junta y por el consejo de administración nacido de la misma. Como consecuencia, David Alvarez Díez y sus hijos Jesús David y Mª José, que también fueron destituidos como consejeros, volverán al consejo de administración de El Enebro, de donde fueron expulsados por sus otros cinco hijos y hermanos (Pablo, Juan Carlos, Emilio, Elvira y Marta).

Según ha explicado el presidente de Eulen, todos ellos van a solicitar "de forma inmediata" al juzgado la ejecución provisional de la sentencia. Contra el dictamen cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Madrid.

Además, ha recordado que a principios de julio, el Juzgado de Primera Instancia número 53 de Madrid dictó otra sentencia "reconociendo en toda su plenitud" los derechos políticos y económicos sobre El Enebro.

El Enebro cuenta entre su patrimonio, además de con Bodegas Vega Sicilia, con valores como Bodegas y Viñedos Alión, Bodegas y Viñedos Pintia y las cárnicas con marca de calidad Valles del Esla. En 2010 facturó 40 millones de euros, lo que representa un incremento del 5,4% respecto al ejercicio precedente y aumentó un 25,6% su beneficio antes de impuestos.

Las divergencias familiares también se han sucedido en Eulen. El grupo de servicios se rige desde febrero de 2010 por el sistema de administración solidaria, después de que en una junta convocada judicialmente se acordase la disolución del consejo de administración -integrado entonces por el fundador, sus siete hijos y un independiente- y la designación de Alvarez y su hija María José como administradores solidarios.