El déficit del Estado se reduce un 25% gracias a los ingresos por impuestos

Dos años después de que la crisis económica comenzase a azotar a España, empiezan a surgir los primeros datos positivos. El Estado ha reducido su déficit durante el primer semestre del ejercicio un 24,7% con un saldo negativo de 29.765 millones de euros, el 2,83% del PIB, respecto al mismo periodo del año anterior cuando esta cifra alcanzaba los 39.553 millones. El incremento de los ingresos fiscales (impuestos directos e indirectos) y una leve recuperación económica son las causas principales de esta mejora.

Los datos divulgados esta mañana por el Ministerio de Economía, dan un respiro a sus responsables, que han valorado positivamente los datos, ya que muestran "de forma clara que la situación se estabiliza y apuntan al cumplimiento de las previsiones del Gobierno", según ha explicado el secretario de estado de Hacienda, Carlos Ocaña.

La mejora de los ingresos, según ha reconocido el propio Ocaña, ha tenido una gran relación con los cambios normativos aprobados en materia fiscal el pasado mes de diciembre. Ahí reside, fundamentalmente, la clave del aumento en la recaudación del IRPF, tributo que se ha visto beneficiado de la supresión parcial de la deducción de hasta 400 euros y del incremento al 19% del tipo aplicable a las rentas de capital. Esto se ha traducido en un alza del 3,6% respecto a 2009.

Una mención especial merece el IVA, que eleva los ingresos con un aumento del 31,3%. Esto se debe en buena medida a la disminución de las devoluciones anuales por los menores importes solicitados y al incremento de los ingresos derivados del cobro de los aplazamientos concedidos durante 2009. Aún así, también es destacable el efecto que haya podido tener la estabilización de la actividad económica, el incremento de los ingresos por importaciones y el mejor comportamiento de las ventas interiores. Una reactivación que puede tener su origen en el adelanto del consumo para evitar el alza del IVA que entró en vigor el 1 de Julio. Preguntado al respecto, el secretario de estado ha evitado dar cifras concretas, pero ha afirmado que espera un crecimiento de "dos dígitos" de la recaudación derivada de este tributo en las cifras de final de año.

Los pagos siguen al alza

La partida posiblemente más dificil de entender sea la relativa al apartado del gasto. Con el plan de austeridad más importante desde la Guerra Civil, los pagos continúan creciendo, menos, pero lo siguen haciendo. Un 3,6% respecto al primer semestre de 2009. Según el ministerio, ésto se debe a que los recortes anunciados por el Gobierno tendrán efecto en la segunda parte del año, "cuando se da la mayor parte del gasto estatal". Hacienda imputa estas cifras a los cambios en el sistema de financiación autonómica, que eleva las transferencias mensuales a estas administraciones, y a los mayores gastos financieros. "Estos crecen por el mayor nivel de deuda y no por el pago de tipos de interés más altos", ha matizado Ocaña.

Un dato que ha llamado la atención ha sido el de la partida de gastos de personal, que desde junio ya se ha visto afectada por la reducción en la nómina de los funcionarios, pero que crece un 2,4% por las incorporaciones a plantilla aprobadas antes del tijeretazo.

Ocaña también se ha pronunciado sobre la regularización de las 3.000 cuentas suizas de clientes españoles, a los cuales la Agencia Tributaria envió hace apenas un mes un requerimiento para que regularizaran su situación. El secretario ha reconocido que estas notificaciones han surgido efecto y que ya se han registrado "algunos ingresos". A pesar de esto, declinó facilitar datos concretos y terminó por señalar que "las cosas van cómo tenían que ir."

Superávit de la Seguridad Social

Frente al déficit del Estado, la caja única de la Seguridad Social se mantiene en superávit, aunque este sea cada vez más pequeño. En concreto, el excedente de 9.913 millones registrado hasta junio, que equivale al 0,94% del PIB, es un 16% inferior al de 2009. El secretario de Estado, Octavio Granado, ha destacado la recuperación que se está empezando a notar en los ingresos por cotizaciones, que aumentan en junio frente a mayo pero que en el dato acumulado desde enero siguen arrojando un recorte del 0,07% frente al año pasado. Por el contrario, se mantiene el aumento de los gastos por el alza del paro, que han subido un 4,38%.