La morosidad recupera en abril su ritmo de subidas y marca el nivel más alto desde 1996

La llegada de los calores veraniegos parecen estar secando algunos de los tan cacareados brotes verdes en el desarrollo de la crisis económica actual. Así, después de reavivarse en los mercados bursátiles los temores sobre el sector financiero, el último dato sobre la morosidad que ha hecho público hoy el Banco de España recupera las subidas de forma clara y ha cerrado abril en el 4,50% con un total de 83.658 millones, la tasa más alta desde 1996.

Así, tras cerrar marzo con un moderado ascenso de 1.050 millones, el más pequeño desde el inicio de la crisis a finales de 2007, hasta situarse en el 4,27%, abril ha vuelto a registrar un aumento de más de 4.210 millones en los créditos dudosos que tienen en sus carteras bancos, cajas, cooperativas de crédito y financieras. Un incremento que, sumado a la reducción del volumen del capital prestado en otros 4.227 millones hasta los 1.857.522 millones de euros arroja esta tasa del 4,50%.

Por entidades, el dato más llamativo es que las cajas, tras reducir en marzo por primera vez en 26 meses su morosidad, han vuelto a ver que su cartera de dudosos aumentaba hasta el 5,05% en abril. La razón es su mayor exposición al ladrillo, que ha multiplicado por ocho su mora frente al nivel que registraban hace un año con un 7,5% y mantienen a las cajas al frente del resto de entidades. Los bancos, por su parte, han cerrado el mes con una tasa del 3,81% y 30.777 millones de difícil cobro, tres décimas o 1.710 millones más que en marzo.

Además, la tasa de mora de las entidades financieras que operan en España, que acumula 22 meses consecutivos al alza, podría cerrar 2009 en los mismos niveles que alcanzó durante la última crisis de 1993, cuando llegó al 9%, según las previsiones de los expertos. De hecho, en los últimos 12 meses, este porcentaje, que recoge a los clientes que no cumplen con el pago de sus cuotas durante tres meses o más, ya se ha más que triplicado. Y la evolución del sector inmobiliario, que sigue sin poder remontar sus ventas e invertir la tendencia a la baja en las obras de nueva construcción, da más argumentos a las tesis de los analistas.