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Los países más pobres recibirán 300.000 millones de dólares en remesas en 2007

Según el Banco Mundial, esta cifra es 50% más alta que los envíos realizados el año pasado

El dinero de las remesas se ha consolidado como la principal fuente económica en los países en vías de desarrollo, superando por tres el dinero que los países más desfavorecidos del mundo reciben de la ayuda internacional. Según datos del Banco Mundial, los países más pobres del mundo recibirán este año una cuenta global un 50% más alta, lo que la fijará en unos 300.000 millones de dólares frente a los 200.000 millones del año pasado.

Este dinero que vuela a través de las fronteras por todo el planeta es indispensable para sus destinatarios que, según las investigaciones del Banco Mundial, en su gran mayoría lo gastan en comida, ropa, vivienda, educación y, en algunos casos, en la compra de una televisión u otro aparato electrónico. El estudio, publicado hoy por el diario The New York Times revela sin embargo, que aún hay decenas de miles de millones que pueden destinarse al ahorro o inversiones en los lugares donde el capital es escaso.

"Las remesas han demostrado reducir la pobreza en los hogares, por lo que las autoridades monetarias están buscando incrementar su efecto en el crecimiento económico", sostiene el Banco Mundial, según el diario. Por ejemplo, algunos inmigrantes envian el dinero a sus países de origen y los depositan en cuentas de ahorro en entidades pequeñas, como instituciones de microfinanzas, que utilizan ese capital para otorgar préstamos a los empresarios locales.

Difícil de rastrear

Es muy difícil rastrear el dinero de las remesas. El Banco Mundial es el principal recopilador de la cifras, que recoge de la información de las operaciones de transferencia de los bancos centrales. Según el organismo multilateral, el año pasado la cifra fue de 208.000 millones de dólares (unos 142.000 millones de euros al cambio de hoy). Para este año la cifra superará los 300.000 millones (unos 205.000 millones de euros).

El fenómeno de la inmigración es realmente global. Nuevos estudios realizados por el Fondo Internacional para el Desarrollo de la Agricultura, que depende de las Naciones Unidas, y el Banco Interamericano de Desarrollo, han revelado que 60 países recibieron 1.000 millones de dólares o más el año pasado en remesas, mientras que en 38 países, los envios de dinero desde el exterior significaron más del 10 por ciento del producto interior bruto.

Cifras del Banco de España difundidas ayer revelaron que las remesas de los inmigrantes que trabajan en España a sus países de origen alcanzaron los 5.249 millones de euros en los ocho primeros meses del año, con un crecimiento del 23,4% respecto al mismo periodo de 2006.

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