Los multimillonarios eligen Londres
Una ley británica de hace dos siglos no grava los intereses y los beneficios que se obtienen de negocios de fuera del Reino Unido
Londres se ha convertido en los últimos tiempos en el destino que crece más rápidamente en número de multimillonarios de diversa procedencia que quieren evadir impuestos y aprovechan el hecho de que la Hacienda británica no grava sus negocios fuera del país.
Una ley de hace más de 200 años, diseñada para que los colonialistas británicos mantuvieran intactos sus ingresos generados fuera, beneficia ahora a los ricos no británicos, que fijan su residencia en Londres, pero a los que se concede el estatus de "no domiciliados" por mantener sus lazos familiares y sus principales negocios fuera de este país.
El fisco británico sólo grava en ese caso los intereses u otros beneficios que el extranjero obtenga de sus negocios o ahorros en el propio Reino Unido, pero no los derivados de sus actividades empresariales o fiscales fuera de territorio británico.
En los últimos cinco años la cifra de personas que se han acogido a esa categoría se ha disparado hasta llegar a 112.000 personas en abril del 2005, último dato aportado por el Gobierno, un 74% más que en el 2002.
Los analistas aseguran que en los últimos meses ha aumentado vertiginosamente entre los propios británicos la cifra de solicitantes de esa condición, que tiene una validez máxima de 20 años y para la que Hacienda sólo hace diecinueve preguntas en un formulario que se puede descargar en su web.
De momento no se espera la abolición o enmienda de esa ley, y la razón para mantenerla es que atrae a Londres a empresarios, dijo al diario "The Observer" el portavoz de economía del Partido Liberal Demócrata británico, Vince Cable.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.