El Banco de España alerta de los riesgos de la "elevada deuda de las familias"

El gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, ha alertado hoy de que la economía española, pese a sus buenos resultados, puede tener "riesgos a medio plazo", entre los que citó el aún alto diferencial de inflación con la UE y el "elevado endeudamiento de las familias".

En su intervención en la Comisión de Presupuestos del Senado, Fernández Ordóñez añadió que estos dos factores pueden introducir "algunas incertidumbres" al crecimiento que la "política económica debe contribuir a despejar", si bien reconoció que para los próximos trimestres las perspectivas de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) son "relativamente saludables".

Además, Ordóñez ha asegurado que las subidas de tipos de interés "no sólo son útiles para mantener la recuperación del área del euro con la estabilidad de los precios", sino que son también beneficiosas para España porque este "ligero" endurecimiento de las condiciones monetarias favorece que se contenga la demanda interna y "ayuda a reequilibrar la expansión".

Al referirse a estos dos riesgos, el gobernador matizó que es mucho más importante el del diferencial de inflación, que sigue mermando la competitividad de la economía, que el endeudamiento de las familias, que en cualquier caso tienen una importante riqueza patrimonial.

"Vulnerabilidad" ante subidas de tipos

Añadió que al analizar en endeudamiento de las familias hay que recordar por una parte dicha solvencia patrimonial, aunque por la otra la "vulnerabilidad" que conlleva a veces la subida de tipos y el cambio en el pago de las rentas, algo que puede afectar especialmente en los segmentos de la población cuyo margen de maniobra "es limitado".

Miguel Angel Fernández Ordóñez valoró en su intervención la importante bajada de inflación registrada en los tres últimos meses, ayudada por el descenso del precio del petróleo, que ha colocado la tasa en el 2,5%, y añadió que "sería altamente deseable" que esta desaceleración de los precios "se pudiera consolidar en los próximos meses".

No obstante, advirtió de que la mejora de la inflación subyacente -que excluye los precios de la energía y los alimentos frescos- ha sido "muy limitada y se mantiene en tasas cercanas al 3%", y recordó que es aún elevado diferencial con la zona euro, especialmente en los precios de los servicios.