Un juez culpa a un trabajador del accidente que le costó la vida y rebaja la pensión a su viuda

José manejaba el 28 de mayo de 2000 una grúa con la que estaba descargando un barco en Barcelona. Cuando intentó alzar una caja que pesaba 2 toneladas más de lo que la máquina podía soportar, la grúa volcó y el cayó al vacío desde una altura de ocho metros. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ha decidido hoy que la culpa fue suya, y le quitado así parte de su pensión de viudedad y orfandad a la mujer e hijos del trabajador, que perdió la vida en el suceso.

La sentencia del tribunal responsabiliza a José R. B. del accidente laboral por manejar la grúa con exceso de peso, dado que "no es humana ni jurídicamente posible admitir que haya existido infracción incumplimiento u omisión por parte de la empresa". El trabajador, según esta sentencia, sabía que su trabajo entrañaba riesgos; es más, está obligado a "poner de su parte para evitar desgracias", puesto que de otro modo todos los accidentes serían responsabilidad de la empresa contratante, que debería pagar por ellos.

Tragedia en el puerto

José R. B. trabajaba aquel 28 de mayo de hace dos años para la compañía Serviname, dedicada a la construcción y reparación naval. Ocupaba ese día la cabina de una grúa con la que se descargaba un buque en dique seco en el puerto de Barcelona. El tribunal considera probado que nadie le advirtió de que la caja que iba a levantar estaba llena y pesaba más de lo que la máquina podía soportar; además, no contaba con mecanismos que le alertaran en caso de sobrecarga, y los dos únicos dispositivos que podrían haberlo hecho no consta que funcionaran ese día.

En su momento, la Inspección de Trabajo concluyó que la empresa había cometido una infracción grave por "incumplir la normativa sobre prevención de riesgos laborales, creando un riesgo grave para la salud de los trabajadores"; propuso en consecuencia una sanción de 6.000 euros. La Seguridad Social litigó para que Serviname pagara un recargo del 30% en las pensiones para la viuda y los dos hijos del fallecido.

El empresario, inocente

Pero para el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña el motivo del accidente, la sobrecarga de la grúa, "no permite estimar que exista culpa alguna del empresario". Era responsabilidad del trabajador saber si la caja estaba llena o no, algo que "no puede pasarle desapercibido" dado que es un profesional especializado en estas tareas, según la sentencia.

Tres fallos judiciales conmocionaron a la opinión pública a principios de mes al responsabilizar a sendos trabajadores de los accidentes laborales que sufrieron, que a uno le costó la vida y a los otros dos lesiones muy graves. En Barcelona, la Audiencia provincial culpó a un albañil del accidente que le dejó paralítico por no negarse a trabajar ante las peligrosas condiciones de la obra; en Córdoba, una sentencia respaldada por el Tribunal Supremo culpaba a un obrero agrario del siniestro que le costó la vida en una finca de esa provincia hace cuatro año; y en Pontevedra, la Audiencia provincial responsabilizó a un operario de la construcción por "imprudente" del accidente que le dejó incapacitado.