La Comisión urge a una reforma de las pensiones para afrontar el envejecimiento de la población

La economía mundial no atraviesa su mejor momento. Dos de las máximas autoridades económicas del mundo, el presidente de la Reserva Federal de EE UU, Alan Greenspan, y el comisario de Asuntos Económicos de la UE, Pedro Solbes, así lo han atestiguado hoy. El estadounidense ha alertado de riesgos de deflación en EE UU, al tiempo que reconocía que el fin de la guerra en Irak no ha terminado de aclarar el panorama económico. Por su parte, el español ha destacado el peligro que se cierne sobre los sistemas de pensiones europeos y su equilibrio financiero por el envejecimiento de la población.

Con el dólar a la baja, las exportaciones europeas se enfrentan a una situación complicada, amén de que los dos principales motores económicos europeos, Alemania y Francia, tiran a duras penas de sus economías. Por otro lado, la Comisión Europea, ha lanzado, por boca de Pedro Solbes, una seria advertencia a ocho países, entre ellos España, sobre la futura viabilidad de sus finanzas públicas, ya que existe un claro riesgo de desequilibrio a largo plazo debido al aumento del gasto ligado al envejecimiento de la población. En el caso de España, se prevé que el el gasto en pensiones aumente un 8% del PIB entre 2000 y 2040.

Solbes ha presentado el informe periódico sobre el estado de las finanzas públicas europeas, en el que se señala que España y Grecia son los que corren mayor riesgo de que aparezcan desequilibrios presupuestarios debido al previsible aumento del gasto en pensiones. En este sentido, sólo Dinamarca, Luxemburgo, Holanda, Finlandia, Bélgica, Suecia y Reino Unido "parecen tener" finanzas públicas sostenibles, mientras que el resto de países hace frente a mayores o menores problemas.

Solbes ha indicado que la situación demográfica y la estructura de los sistemas de pensiones presionan para que "se adopten medidas ambiciosas y de inmediato", pues "sólo tenemos una posibilidad" de poner en orden las finanzas públicas antes de que se note el impacto presupuestario del envejecimiento de la población en 2010. Así, "en general debemos reformar nuestros sistemas de pensiones y reducir los déficit y la deuda porque si no la brecha financiera será insostenible", ha indicado Solbes.

La receta propuesta por Solbes, "muy sencilla pero difícil de aplicar", es aumentar el porcentaje de empleo en Europa, reducir la deuda pública de forma que quede un margen para financiar las pensiones del futuro e introducir las reformas necesarias en los sistemas de pensiones de los distintos países miembros.

Riesgo de deflación

Mientras, al otro lado del Atlántico, la situación no es mucho mejor. El discurso del presidente de la Reserva Federal ha tenido dos vertientes. Por un lado, ha destacado que el panorama económico de EE UU sigue siendo turbio, pese a que la guerra en Irak ha terminado. Aunque ha augurado un mejor ritmo de crecimiento y baja inflación para el futuro próximo, Greenspan ha destacado que el final de la guerra ha contribuido a una caída de los precios del petróleo y ha mejorado la confianza de los consumidores, pero "todavía no tenemos información suficiente para una evaluación concluyente sobre la fortaleza de la economía".

En su segundo hilo argumental, Greenspan ha advertido de que "la deflación es una posibilidad" y ha reconocido que este fenómeno puede complicar las cosas porque las autoridades económicas tienen más experiencia para lidiar con la inflación que con una caída general de precios. "Estamos haciendo esfuerzos muy significativos para comprender qué es este fenómeno", ha dicho el presidente del banco emisor estadounidense, aunque ha matizado que "no vemos que actualmente estemos en deflación ni que en los mercados haya una preocupación grave". En todo caso, "aunque percibimos los riesgos como menores, las consecuencias potenciales son muy sustanciales y podrían ser muy negativas".