_
_
_
_
_
JUICIO MICROSOFT

La juez no acepta como prueba un 'e-mail' interno de Microsoft que amenazaba a Intel

El mensaje fue enviado por Joachim Kemper, vicepresidente de la empresa, a Bill Gates

Un correo electrónico interno enviado por un vicepresidente de Microsoft a Bill Gates en el que señalaba que este gigante informático tomaría represalias contra las empresas "no amistosas" no será incorporado al juicio que se sigue en Washington contra esta compañía por prácticas monopolísticas.

Por segunda vez, los nueve Estados demandantes han solicitado a la juez Collen Kollar-Kotelly incorporar este documento —un correo electrónico interno enviado en 2000—, en el que Joachim Kemper, vicepresidente de la empresa, amenazaba con tomar represalias contra Intel —el mayor fabricante de chips— por su política de favorecer el sistema operativo Linux, rival de Microsoft.

Más información
Microsoft afronta su juicio por monopolio con la abierta oposición de nueve Estados
Bill Gates predice el final del programa Windows si la justicia estadounidense sanciona a Microsoft

Linux es un sistema operativo gratuito, desarrollado por un joven finlandés, que se ha convertido en una alternativa para empresas y en menor medida usuarios individuales, frente a los programas Windows de Microsoft.

Pero la juez ha vuelto a rechazar la petición de los Estados demandantes —Iowa, Utah, Massachusetts, Connecticut, California, Kansas, Florida, Minesota, Virginia Occidental, y el Distrito de Columbia—, por considerar que no hay razones suficientes para incorporar el documento en este momento del juicio.

El mensaje de Kemper, dirigido al presidente y fundador de Microsoft, Bill Gates, indicaba que Intel estaba contactando con fabricantes de ordenadores "que no son amistosos" y les están animando "a utilizar Linux".

Kemper señalaba que se pararían actividades conjuntas con Intel para intensificar la colaboración con sus competidores. El vicepresidente de Microsoft también decía que intentaría "restringir la entrega de código fuente cuando sea posible".

El código fuente de los programas de Microsoft es una pieza fundamental para los fabricantes de chips y otros programas para que los sistemas funcionen con la mayor integración posible.

Precisamente, una de las demandas de los nueve Estados que acusan a Microsoft de prácticas monopolísticas es la necesidad de que la compañía informática proporcione a programadores y fabricantes de equipos el código fuente de sus sistemas operativos para asegurar que cualquier otro programa funcione sin problemas con Windows.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_