Arthur Andersen mantiene conversaciones para su venta o su fusión con Deloitte
La empresa compradora está estudiando cómo evita las responsabilidades legales de la auditoría en la quiebra del gigante energético
Arthur Andersen, la consultoría salpicada por el escándalo de la quiebra del gigante energético Enron, mantiene desde hace una semana contactos con su rival Deloitte Touche Tohmatsu para una posible fusión, según informa The New Yok Times.
De acuerdo con el diario, las conversaciones se han mantenido durante la semana pasada y se barajan distintas opciones, desde la fusión total a la venta de parte de su negocio.
Lo que no está claro es si el nombre pervivirá en la fusión o, por el contrario, si desaparecerá, lo que parece más probable. Además de las discusiones sobre el precio de la venta o de la forma en que se va a realizar la adquisición, Deloitte está estudiando como evita las responsabilidades legales de la implicación de Andersen en la quiebra de Enron.
Enron presentó el pasado mes de diciembre la mayor suspensión de pagos de la historia y ha puesto contra la cuerdas al presidente de Estados Unidos, George W. Bush. La auditoría Anderesen aprobó las cuentas del gigante energético de Houston antes de que se declarase en quiebra. Varios de sus directivos reconocieron haber destruido material y son sospechoso de haber ayudado a maquillar las cuentas del gigante energético
Sanciones del Gobierno
El departamento de Justicia ha asegurado que hay indicios suficintes para que la firma pueda estar imputada por obstrucción de la justicia en el caso Enron. Por este motivo varias empresas como Merck & Co. O Delta Airlines han abandonado su vinculación con Arthur Andresen
Además de enfrentarse a un a una posible responsabilidad criminal, Andersen se enfrenta a una posible sanción de la Comisión de Seguridad e Intercambio estadounidense. Ante esta situación, Deloitte está dispuesto a adquirir la empresa, la quinta en EE UU, pero sus responsabilidades legales.
Una fusión o una adquisición de la firma de Chicago por un competidor como Deloitte inquieta a las otras grandes firmas, al verla como un peligro potencial para sus negocios. Andersen ha sido designado por parte de la Reserva Federal para dirigir una investigación de las funciones de las firmas que operan en los Estados Unidos y para elaborar recomendaciones para su control.
Si Andersen fuera finalmente vendido, las cinco grandes auditoras quedarían reducidas a cuatro, lo cual traería un potencial peligro de monopolio que debe ser estudiado por la Comisión Federal del Comercio estadounidense, que trabaja para asegurar el juego limpio en el mercado de EE UU.
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