El mar devuelve al Orzán los cuerpos de los dos policías

A los siete días de arrebatarlos, el mar ha devuelto ayer los cadáveres de los dos policías que perdieron la vida junto a un tercer compañero y un estudiante en la playa del Orzán, en pleno centro urbano de A Coruña. Pese a que había pocas esperanzas de encontrarlos en la bahía coruñesa, tras los incesantes rastreos por tierra, aire y mar del amplio operativo de busca, los cuerpos de dos de las tres víctimas que aún permanecían desaparecidas fueron hallados muy cerca de donde fueron engullidos por las olas. Rodrigo Maseda, de 35 años, apareció en el mismo arenal del Orzán, y José Antonio Villamor, de 34, en las inmediaciones de la playa vecina de Riazor, detrás del colegio de las Esclavas.

Ya sólo queda por localizar al estudiante eslovaco Tomás Velicky, cuarta víctima de una tragedia en la que también falleció otro policía, Javier López López, cuyo cadáver fue recuperado apenas cuatro horas después de ser engullido por una enorme ola.

Fue un ciudadano de los muchos que esta semana escrutan el costa desde el paseo marítimo de A Coruña el que avistó ayer sobre las 11 de la mañana un bulto que yacía en una esquina del Orzán, casi en el mismo lugar donde todo ocurrió la madrugada del viernes 27 de enero. Resultó ser el cadáver de Rodrigo Maseda, natural de Burela, donde será enterrado hoy tras recibir a título póstumo la Medalla de Oro al Mérito Policial. Miembro de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional en A Coruña, había acudido vestido de paisano a la llamada de emergencias para tratar de auxiliar a un estudiante en apuros en un mar entonces enfurecido con olas de hasta cinco metros.

Poco después de hallar el primer cuerpo, se encontró flotando en el mar un cinturón y una pistola, por lo que se volvió a intensificar la busca. Pasadas las 15.30 horas, buceadores voluntarios del Club de Mar localizaron entre las rocas de la zona de las Esclavas el cadáver de José Antonio Villamor. Natural de Friol (Lugo), era el único de los tres agentes que estaba uniformado cuando falleció, como sus compañeros, engullido por el mar al intentar rescatar al estudiante. El Ministerio del Interior también impondrá a Villamor la Medalla de Oro al Mérito Policial.

El operativo de busca, ampliado a los cabos Fisterra y Ortegal, continuará hoy para tratar de encontrar a Tomas Velicky. Originario de Bratislava (Eslovaquia), de 23 años, estaba finalizando una beca Erasmus en la facultad de Económicas de A Coruña cuando, tras una noche de juerga, bajó con compañeros de estudios a la céntrica playa, pese a estar declarada la alerta naranja en la costa. Según relataron sus amigos a sus padres, Velicky se acercó al agua cuando una ola le atrapó y le arrastró mar adentro. Para auxiliarlo se movilizaron varios agentes y algún ciudadano: los tres policías nacionales también fueron llevados por un golpe de mar.

La familia de Rodrigo Maseda, que estuvo toda la semana en A Coruña pendiente de las labores de busca, emitió ayer un comunicado de "sincero agradecimiento por las muestras de cariño recibidas en estos duros momentos", por "todos los medios y esfuerzos desplegados" y "a todos los coruñeses por el tiempo dedicado a mirar y recorrer la costa buscando" al agente.