Hosbec arremete contra los alcaldes del PP de Alicante

El presidente de la patronal hotelera autonómica Hosbec, Toni Mayor, difundió ayer un duro alegato contra el Ayuntamiento de Alicante. En un artículo de opinión arremetió contra la clase política local, a la que acusó de comportarse "sin ningún tipo de ambición de progreso" y de nadar "en una falta de cultura urbana y voluntad de consenso". En línea con esta aseveración, Mayor concretó a este periódico que se refería "principalmente a Luis Díaz Alperi y Sonia Castedo [los dos últimos alcaldes de la capital y ambos del PP]". "No hemos tenido la suerte de tener a los políticos adecuados", dijo en alusión a estos políticos, "aunque el resto tampoco es que sea de primera división", añadió.

En la nota difundida por Hosbec, su presidente asegura no entender "qué es lo que ocurre en la ciudad de Alicante o qué es lo que ocurre con los diferentes políticos que han estado al mando de la capital de la cuarta provincia española". "Alicante no ha cambiado prácticamente nada en los últimos 30 años y no ha sufrido el cambio que otras capitales españolas han trabajado durante este tiempo", aseguró. Y puso como ejemplo que la capital alicantina "es la única que no tiene un Palacio de Congresos, mientras Badajoz tiene dos con la mitad de camas que Benidorm", un problema que atribuyó a que la clase política local "ha mirado hacia dentro de la ciudad en vez de hacerlo hacia fuera de la provincia". "Alicante se ha mirado al ombligo en vez de mirar a la provincia", sentenció.

La intervención de Toni Mayor se produjo como reacción de la patronal hotelera a los problemas que está generando la entrada del AVE en la ciudad de Alicante. Los hoteleros reclaman que llegue en los plazos previstos, es decir, a finales de este año, "sin retrasos y menos si son tan artificiales como una protección de bienes a los que el Ayuntamiento de Alicante no ha prestado la más mínima atención".

La patronal se refería a la intención de Avant, participada por el Consistorio de Alicante, de salvar los tinglados sin uso de la actual estación frente a la intención de Adif -dependiente del Ministerio de Fomento- de demolerlos para cumplir con el calendario previsto y poder construir allí una parte de la infraestructura de la estación provisional del AVE, que debería estar operativa a finales de este año. El enfrentamiento todavía es más difícil de entender para Hosbec porque hace cuatro años el Ayuntamiento no alegó para proteger los tinglados que ahora intenta salvaguardar.

"El momento económico y la necesidad urgente de crear esperanza y confianza en el empresariado y la sociedad alicantina están por encima" de las "sensibilidades tardías de protección del patrimonio de relevancia local", refirió Mayor en su artículo, que aboga por que el AVE llegue a Alicante "sin retrasos y menos si son tan artificiales como una protección de bienes a los que el Ayuntamiento de Alicante no ha prestado la más mínima atención".

La conclusión del análisis de Toni Mayor es concluyente: "No ha sabido [Alicante] consolidarse como ciudad moderna, ciudad de referencia en alguna faceta de lo contemporáneo. Ahora mismo Alicante está en tierra de nadie, ni es turística ni es otra cosa, es una ciudad indefinida que no le ha sacado a los 30 años de democracia el rendimiento de otras".