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El despido de empleados municipales bloquea el gobierno de Los Barrios

La oposición dispone de 30 días para presentar una moción de censura

El alcalde de Los Barrios (Cádiz), el andalucista Jorge Romero, se metió ayer en un auténtico embrollo legal al rechazar el pleno del Ayuntamiento la cuestión de confianza a la que se sometió el regidor para intentar sacar adelante los presupuestos municipales para el próximo año 2012 y la amortización de 178 puestos de trabajo de la plantilla municipal.

Los votos de PP, PSOE y PIBA 2000 impidieron a los andalucistas la aprobación del único punto del orden del día, que el alcalde trasladó por tercera vez al Pleno de la Corporación, con la intención de buscar el único resquicio legal que le queda para llevar adelante su intención de reducir la plantilla de trabajadores, después de que la Junta rechazase el pasado miércoles el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por el Consistorio.

La Junta había rechazado el ERE planteado por el gobierno municipal

Tras el pleno y el rechazo de la cuestión de confianza a la que se sometió Romero, los grupos de la oposición tienen 30 días para poder presentar una moción de censura que, en el caso de que fuese aprobada, conllevaría la elección de un nuevo alcalde. De lo contrario, los dos asuntos a los que hacía referencia el orden del día, quedarán aprobados por ley.

Ante esta situación y tras finalizar la sesión, Romero quiso dar una vuelta de tuerca más al convocar al comité de empresa a una reunión que se celebrará el próximo martes. En ella estudiarán las propuestas de los sindicatos para hallar una solución intermedia a la amortización de los 178 puestos de trabajo que el alcalde andalucista pretende desvincular del Ayuntamiento.

"Les queda un mes para acercar posturas antes de que entren los presupuestos en vigor y estoy dispuesto a estudiar cualquier opción que no supere los 10,5 millones que el presupuesto tiene previsto para el capítulo de personal", avanzó Romero.

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Mientras tanto, el concejal del PP, José Carlos Lara insistió en que, "antes de tomar la decisión de despedir a los 178 trabajadores y amortizar las plazas, sería conveniente hacerlo sobre el marco de la RPT (Relación de Puestos de Trabajo) que es la que valora y determina la plantilla municipal". Por eso, los populares votaron en contra de la cuestión de confianza, al considerar que, "aún hay tiempo para buscar soluciones y negociar". Asimismo, la portavoz del PSOE, Estefanía Ruiz, justificó la postura de su grupo: "El despido masivo que se propone mermaría los servicios básicos y eso es injusto e innecesario". Mientras, los trabajadores recibieron ayer el pago de una nómina y media de las dos que les adeudaban.

Por su parte, los trabajadores de La Línea también recibirán parte de las seis nóminas que el Ayuntamiento les adeuda.

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