Arranca la negociación laboral para la fusión de Unicaja y España-Duero

Los representantes sindicales de Unicaja y Caja España-Duero conocieron el miércoles en una reunión celebrada en Madrid el primer borrador del futuro acuerdo laboral de integración de sus plantillas y, según varios de los asistentes, no salieron muy satisfechos. De entrada porque las entidades financieras plantean una reducción de hasta un 20% del total de la plantilla en tres años, lo que supondría la salida de unos 1.800 trabajadores. Los primeros se irían de forma voluntaria, mediante diferentes fórmulas como prejubilaciones, bajas incentivadas o reducciones de jornada.

En esta primera reunión no se precisó en qué medida afecta este recorte a los trabajadores que aporta cada entidad bancaria, ni los departamentos más perjudicados. Fuentes sindicales creen que lo más lógico es que se comience por los servicios centrales, como contabilidad, servicios jurídicos u organización, ya que no tendría sentido seguir contando con una doble estructura. La plantilla afectada gira en torno a los 9.000 empleados.

Las prejubilaciones afectan sobre todo al personal de la entidad malagueña

En la cita también se planteó una reducción salarial. Las mismas fuentes consideran que esta medida recaerá sobre todo en los empleados de Caja España-Duero cuyos sueldos son hasta un 9% más altos que los de Unicaja.

Los sindicatos que participan en la mesa laboral -CC OO, UGT, Csica, UEA y Secar- quieren consensuar una contraoferta para la próxima reunión. De momento, no hay fecha concertada, aunque lo más probable es que se aplace hasta pasadas las fiestas de Navidad. En un preacuerdo que Unicaja firmó el 23 de septiembre con los sindicatos mayoritarios UGT y CC OO se establecía un marco de negociación de seis meses que expiraría el próximo 31 de marzo.

Rafael Martínez, secretario general de UGT Málaga y uno de los asistentes a la reunión, puntualizó ayer que todavía queda mucho por negociar. "Se trata de una propuesta inicial. Es una situación complicada y delicada, por eso vamos a pelear para que se conserven todos los puestos de trabajo", aseguró.

Martínez confió en que las personas que decidan prejubilarse se vayan "en condiciones dignas". Sebastián Toret, portavoz del Sindicato de Crédito y Ahorro Reunidos (Secar) de Málaga, consideró "irrisorias" las primeras propuestas. "Una persona que lleva 35 o 40 años trabajando no se va a ir por nada y menos", dijo.

Fuentes sindicales de León y Valladolid estiman que el grueso de las posibles prejubilaciones podría salir de Unicaja, dado que hasta ahora no se han aplicado este tipo de reducciones en la entidad malagueña. Estas mismas fuentes calculan que podrían afectar, en primer lugar, a unas 850 personas. Tras la fusión de Caja España con Caja Duero, la entidad resultante ya prejubiló a unas 800 personas, todas las que cumplían 56 años antes del 31 de diciembre de 2010, por lo que su plantilla ya no tiene margen para aplicar estas medidas.