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El presidente de la CEOE avala "por sentido común" los recortes de Rajoy

Rosell defiende el diálogo social con los sindicatos para pactar medidas

Manuel V. Gómez

El presidente del PP, Mariano Rajoy, ya ha recibido el aval de CEOE para los recortes y ajustes fiscales que ha anunciado. Se lo dio ayer el presidente de la patronal, Juan Rosell, en su primera aparición pública tras las elecciones generales. No lo hizo directamente. En realidad, defendió "por sentido común" la rebaja de salarios a los funcionarios catalanes y recortes por 1.000 millones que el día anterior había anunciado el presidente de la Generalitat. "No lo está haciendo solo Mas, también lo hacen Cospedal, Núñez Feijóo", prosiguió. Ayer lo propuso Patxi López para los funcionarios vascos. "Hay que hacer lo que hay que hacer", apostilló, "por doloroso que sea".

"España está en situación de peligro", definió Rosell. Y eso exige, para la patronal, siempre partidaria de la austeridad, recortes. "Es matemática pura", explicó el líder de CEOE en un acto organizado por el Fórum Nueva Economía presentado por el presidente de Bankia, Rodrigo Rato.

"Zapatero es el principal impulsor de reformas", dice el líder de la patronal

Defiende la patronal que el problema de las cuentas públicas en España llega por los gastos y no por los ingresos. Los datos dicen que los primeros han caído mucho más que los segundos, recordó Rosell. Anticipándose a los que argumentan que la recaudación del Tesoro en España (35% del PIB en 2010) es menor que en otros países comunitarios dijo: "Francia (49%) es un país más rico". No obstante, también los ingresos españoles son menores que los portugueses (41,4%) o en el conjunto de la zona euro (43,9%).

Antes que Rosell, habló Rato, quien fuera máximo responsable de la política económica con José María Aznar (y Rajoy en el Gobierno), para reclamar al líder empresarial frutos en el diálogo social. "España está en un momento muy importante de su historia económica", expuso Rato. Y eso requiere que "el diálogo social demuestre qué es lo que nos va a dar de cara al futuro".

Rosell recogió el guante: "Hay que buscar puntos de encuentro con los sindicatos". "Las cosas en las que ya estamos de acuerdo [sindicatos y empresarios] hay que empezar a hacerlas públicas", defendió, para mostrar la utilidad del diálogo social. Admitió que de momento tienen un acuerdo "pequeño". Pero echó mano del pacto de pensiones firmado en febrero para mostrar que se pueden alcanzar acuerdos de entidad.

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Estas palabras son significativas. Una de las pocas propuestas concretas de Rajoy en campaña electoral ha sido la reforma inmediata la negociación colectiva para que prevalezcan los convenios firmados en las empresas frente a los territoriales o sectoriales. Y el fracaso de las negociaciones para reformar los convenios en primavera anticipa que el pacto entre sindicatos y patronal -donde no hay una postura unánime en esta materia- no sería fácil de alcanzar en un plazo corto pese al cambio político que ha llegado tras las elecciones.

El dirigente empresarial aprovechó su intervención para incidir en su reiterada petición de reformas estructurales. Y reconoció, una vez pasadas las elecciones, el empuje que les dio el todavía presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, desde mayo de 2010. "Es el principal impulsor", dijo.

Pero ayer era el turno de las peticiones al triunfador del pasado domingo, al que reconoció su derecho a marcar sus tiempos para dar a conocer su equipo económico y sus planes inmediatos. Sin embargo, sí que reclamó una reforma laboral que simplifique la "entrada" en los puestos de trabajo; permita flexibilidad interna ("que se arregle como las empresas quieran"); y un despido que sea "parecido al de Europa".

También pidió Rosell una reforma de la financiación autonómica que garantice el mismo gasto en educación, sanidad y servicios sociales a todos los ciudadanos independientemente de la comunidad autónoma en la que vivan, "menos políticos y mejor pagados, para que sean los mejores", y cambios en los libros de texto para "incentivar la vida empresarial desde niños" y acabar "con el discurso incendiario que asimila empresario a codicia".

El presidente de la CEOE, Juan Rosell (izquierda) y el de Bankia, Rodrigo Rato, en el Fórum Europa.
El presidente de la CEOE, Juan Rosell (izquierda) y el de Bankia, Rodrigo Rato, en el Fórum Europa.CRISTÓBAL MANUEL

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Sobre la firma

Manuel V. Gómez
Es corresponsal en Bruselas. Ha desarrollado casi toda su carrera en la sección de Economía de EL PAÍS, donde se ha encargado entre 2008 y 2021 de seguir el mercado laboral español, el sistema de pensiones y el diálogo social. Licenciado en Historia por la Universitat de València, en 2006 cursó el master de periodismo UAM/EL PAÍS.
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