De Burgos a medio mundo

Víctor Martínez Vicario empezó con un pequeño negocio de tintes y pelucas en Barcelona en el que empleaba a varios vecinos de Mecerreyes (Burgos), que trabajaban desde la rectoría del pueblo y mandaban el producto a la capital catalana. En 1974 Martínez Vicario se quedó con una empresa de coloración que iba a cerrar y que le debía dinero. Después de 37 años, esa compañía se ha convertido en un grupo de producción y distribución de productos para la cosmética capilar que desde la localidad de Lliçà de Vall (Barcelona) controla 16 delegaciones internacionales -desde EE UU hasta el golfo Pérsico, pasando por varios países de Latinoamérica- y nueve en España. La firma hoy vende, además, en 40 países y emplea a más de 1.000 trabajadores.

La empresa lanza todos sus proyectos sin pedir dinero a los bancos

El año pasado facturó 103 millones de euros, la mitad en el extranjero

VMV Group -que lleva las iniciales de su presidente- afronta en plena crisis la apertura de nuevas fábricas en Brasil y China, que prevé que puedan empezar a operar en 2012. Desde allí producirá los productos de su marca de cabecera, Salerm, que se distribuye sobre todo en peluquerías y salones de belleza. "Este año ya hemos invertido cinco millones de dólares en la compra de un edificio para la compañía en Nueva York, entre tres y cuatro millones en Costa Rica y otros 2,5 millones en Santo Domingo", explica Martínez Vicario. En Brasil, donde su implantación está resultando más compleja de lo previsto, ya ha desembolsado nueve millones de dólares.

Una de las bazas para seguir creciendo es, según Martínez Vicario, no depender de la financiación bancaria. "Lo hacemos todo con recursos propios, es decir, durante todos estos años hemos estado reinvirtiendo en la empresa. Cada año intentamos abrir o entrar en dos o tres mercados extranjeros", afirma el presidente del grupo familiar. Un caso aparte será su llegada a Pekín, para el que se apoyará en un socio español.

Además de su línea de productos para salones de belleza, VMV Group también se dirige al gran consumo bajo la marca Azalea, que se comercializa a través de Mercadona. Según la empresa, Azalea tiene una cuota de mercado del 22% del tinte de uso doméstico que se vende en España. El grupo facturó el año pasado 103 millones de euros en todo el mundo, de los cuales la mitad provienen de las ventas que efectúa fuera de España. Esa cifra supuso ingresar el 18,5% más que el año anterior. Para este año, el crecimiento no será tan abultado, pero tampoco será nada desdeñable, puesto que Martínez Vicario estima que estará entre el 13% y el 14%. -