Ciscar recorta un 18% al Servef y lo despoja de funciones de formación
El consejero pide consenso contra el fracaso escolar y en la docencia en valenciano
"El presupuesto del Servef baja un 18% y no un 60% como se ha dicho". El consejero de Educación, Formación y Empleo, José Ciscar, explicó anoche en la Comisión de Economía de las Cortes Valencianas que las cuentas de su departamento para 2012, de 4.537 millones de euros, se refieren a una consejería de estructura nueva y, dentro de esa nueva estructura el Servicio Valenciano de Empleo y Formación (Servef), con un presupuesto de 208 millones, ha perdido todas las competencias de formación para centrarse exclusivamente en "el fomento del empleo, la mejora de la empleabilidad y la reducción del desempleo".
Ciscar dio esta explicación a la oposición, que había criticado el recorte en un organismo como el Servef en plena crisis económica, justo cuando más falta hacen las políticas activas orientadas a fomentar el acceso a puestos de trabajo. El titular de Educación, Formación y Empleo anunció que las competencias de formación del Servef han pasado a integrarse dentro de una línea denominada Formación Profesional para el Empleo, dotada con 215,7 millones de euros.
"No habrá reducción de profesores ni bajada de sueldos", dijo el consejero
La oposición aseguró que las cuentas son "irreales"
La diputada socialista Pilar Sarrión afirmó que el presupuesto es "irreal", en lo que coincidió con el parlamentario de la Coalició Compromís Josep Maria Pañella. Ambos resaltaron que las modificaciones realizadas en la ejecución de presupuestos anteriores revelan que, al final, se hacen menos inversiones de las previstas en centros públicos y va a parar más dinero a los centros concertados. La situación de la empresa Ciegsa de construcciones educativas, cuyo presupuesto se dedica casi íntegramente a pagar su voluminosa deuda (57,2 millones se consignan para hacer frente a sus obligaciones financieras), fue señalada por ambos y por la portavoz de Esquerra Unida, Marga Sanz, que previno contra "una espiral privatizadora" de la mano de los denominados centros de iniciativa social, instalaciones educativas que se construyen sobre suelo público por parte de una entidad privada que después disfruta de un concierto educativo para financiarse con fondos públicos.
Ciscar adquirió varios compromisos en el debate con los grupos de la oposición. "No habrá reducción de profesores ni bajada de sueldos", aseguró antes de defender el sistema de conciertos para hacer posible a los padres la elección de centro. Asumió el plan de choque anunciado por el presidente del Consell Alberto Fabra, con el objetivo de acabar esta legislatura con los barracones escolares. Dijo que en enero podrá explicar qué colegios e institutos se licitarán en 2012 y añadió: "Ningún centro de iniciativa social sustituirá a ningún centro público existente".
Ciscar, que está trabajando en el plan de choque contra el fracaso escolar, que la oposición no detectó en las cuentas, explicó que ese plan se articula a través de la fórmula del contrato-programa que ha puesto en marcha. Invitó a la oposición a consensuar esa política y también la del plurilingüismo, que se está negociando con la comunidad educativa tras frenar el intento de su predecesor de implantar por decreto el modelo gallego, que suponía la eliminación de las líneas de enseñanza de la lengua autóctona y su sustitución por un sistema general trilingüe por porcentajes, lo que soliviantó al mundo de la enseñanza. "Queremos el máximo consenso posible, también con los partidos representados en las Cortes", señaló.
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