Touriño replica al PP por sus "calumnias e infamias"
El expresidente de la Xunta Emilio Pérez Touriño respondió ayer a "las graves calumnias e infamias" vertidas en el Parlamento de Galicia, el miércoles, por la diputada del PP Enma Álvarez Chao, quien lo recordó como "el presidente que tomaba el sol con una motobomba rodeando su chalé mientras cuatro personas morían en los incendios" del verano de 2006. La alusión fue retirada del diario de sesiones tras pedirlo el portavoz socialista, Abel Losada, y aceptarlo el popular, Pedro Puy.
Pero, como no ha habido "desautorización, rectificación o desmentido" del comentario de Álvarez Chao, "y en la medida que corresponde con la tesis oficial del PP y de su presidente", dice Touriño, ayer se sintió obligado a valorarlo en un comunicado en el que expresa, en primer lugar, su solidaridad con las familias de los cuatro fallecidos y su "repulsa a su utilización en la lucha partidaria".
"Solo desde una concepción y una práctica de la política basada en la manipulación y la mentira y en el todo vale", añade, "se pueden mantener las graves imputaciones realizadas desde el PP, menoscabando la dignidad de las personas, de la política y de las instituciones". Es fácilmente comprobable, prosigue Touriño, que "desde el primer momento asumí personalmente desde la sede de la Xunta en San Caetano la dirección y coordinación diaria de la respuesta a la oleada de fuegos".
Problema de país
Aquel agosto de 2006 tuvo su residencia familiar en Sanxenxo, a 30 minutos de Santiago, pero no supuso "menoscabo alguno en el ejercicio" de sus "responsabilidades al frente de la Xunta". Junto con el conselleiro de Medio Rural, el nacionalista Alfredo Suárez Canal, se puso al frente de "os dispositivos institucionales de coordinación" . Ello incluía los medios de la Xunta y los del Estado, con "un alto grado de implicación del Gobierno central, lo que garantizó una movilización y colaboración sin precedentes del Ejército y la Guardia Civil, complementada con los medios humanos y materiales facilitados excepcional y solidariamente por comunidades autónomas".
"Más allá de las calumnias vertidas sobre mi persona o de los fallos que se puedan cometer en la lucha contra los incendios", concluye, "tengo la convicción de que la acción política debería ser capaz de desterrar la utilización de las víctimas y la manipulación partidaria en aras del esfuerzo compartido y la acción conjunta frente a un problema de país".
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