La campaña abre con recortes, deuda a proveedores y más paro
La renuncia del PSPV a dar su mitin en la plaza de toros evidencia sus inseguridades frente a un PP crecido pese a la tensión social
El paro registrado en la Comunidad Valenciana ya ha superado el medio millón de personas. Los farmacéuticos amagaron con huelgas en plena campaña electoral y el Consell tuvo que sacar 60 millones de debajo de las piedras para frenar las movilizaciones y evitar una imagen que en nada iba a favorecer la imagen de un PP lanzado a la victoria sin apenas oponente. Ayer, también, medio centenar de delegados de Intersindical se manifestaban por las calles de Valencia en protesta de los recortes presupuestarios efectuados por el Consell.
La campaña del 20-N arranca en medio de un amplio malestar social y con las únicas incógnitas de saber si los socialistas romperán el suelo electoral fijado en las elecciones municipales y autonómicas y si Esquerra Unidad y Compromís revalidarán en las urnas los buenos resultados cosechados el pasado mes de mayo. La amplia victoria del PP se da por descontada. Tan solo queda por conocer la magnitud de la misma.
La tensión en el seno del PSPV se puede cortar. El cambio de escenario de la plaza de toros por el pabellón de la Fuente de San Luis con la excusa meteorológica impuesta desde Ferraz da la medida de hasta dónde llegan sus inseguridades. A los populares les faltó tiempo para subrayar que la renuncia al coso taurino estaba motivada por "el miedo a no llenar la plaza". "El pinchazo", dijeron, "es la antesala de la derrota".
El PP, con viento en las velas, toma el dato del paro para reclamar el cambio político porque, en palabras de la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, "el Gobierno ha tocado fondo". Desde Castellón, el candidato socialista Ximo Puig intenta frenar el alud que se le viene encima a su partido: la solución a la crisis no puede volver a ser el modelo utilizado por el PP en la Comunidad Valenciana.Los principales retos electorales de los partidos en esta campaña electoral se localizan en las circunscripciones de Valencia y Alicante. Tanto los partidos minoritarios como el PP aspiran a beneficiarse de la caída en barrena de los socialistas que auguran los sondeos.
En Valencia, la circunscripción que más diputados reparte (16), Esquerra Unida y Compromís pueden ser los grandes beneficiados de las pérdidas del PSOE, que en las elecciones generales de 2008 obtuvo siete escaños y que, en esta ocasión, podría perder dos diputados que se repartirían los partidos minoritarios. El PP parece tener asegurada su hegemonía y repetirá, según los sondeos, los nueve escaños de hace cuatro años. Fuerzas como Unión Progreso y Democracia (UPyD), que presenta al actor Toni Cantó, no parecen tener, a priori, posibilidades de obtener representación.
En la provincia de Alicante, donde el PSPV-PSOE obtuvo cinco diputados hace cuatro años, los sondeos apuntan a una previsible pérdida de un escaño. Este diputado, a fecha de hoy, podría adjudicárselo el próximo día 20 el PP, aunque Esquerra Unida podría entrar finalmente en el reparto.
En la circunscripción de Castellón, donde solo se reparten cinco escaños, el resultado parece inamovible, aunque los populares puedan aumentar su diferencia respecto a los socialistas. De este modo, el PP repetiría los tres escaños y el PSPV-PSOE dos.
El Senado, previsiblemente, como ya ocurrió hace cuatro años, se decantará del lado de los populares, que lograrán la representación mayoritaria.
Los candidatos de los principales partidos iniciaron la campaña electoral al filo de la medianoche de ayer con el objetivo de rebatir o consolidar los sondeos demoscópicos y movilizar al electorado.
La cabeza de lista por Alicante, la ministra de Sanidad, Leire Pajín, que realizó la pegada de carteles en Benidorm, aseguró que hará una campaña "transparente y de propuestas". Pajín retó a Federico Trillo, cabeza del PP por Alicante, a un cara a cara y no a "esconderse y venir por Alicante cada cuatro años en campaña". Esta será la única de las tres circunscripciones en la que no está previsto un debate entre los candidatos del PP y el PSPV-PSOE.
En Valencia, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, acompañó al cabeza de lista, Esteban González Pons, que defendió la necesidad de un cambio en España para salir de la crisis.
El candidato de Compromís, Joan Baldoví, abrió la campaña con un llamamiento a la movilización para lograr, por primera vez en su historia, representación nacionalista, progresista y ecologista en el Congreso.
Ricardo Sixto, de EU, también apeló a los votantes para recuperar la representación que EU perdió en los comicios de 2008.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.