El Observatorio del Comercio sigue en punto muerto después de diez años

Alberto Fabra, presidente de la Generalitat, se comprometió esta semana a potenciar al actuación del Observatorio del Comercio con el desarrollo de la nueva ley del sector. El presidente regaló a los asistentes, al acto de entrega de reconocimiento al Comercio Excelente en Castellón, un discurso adecuado a la ocasión. Pero sus palabras tuvieron un tono agridulce para muchos representantes patronales y técnicos relacionados con un sector al que están vinculadas casi la cuarta parte de las empresas censadas en la Comunidad Valencia, que emplea al 11% de la masa laboral y que genera un 10% de la riqueza regional.

El Observatorio del Comercio se constituyó hace diez años con toda una serie de posibles competencias que jamás ha desarrollado. El amplio espectro de representantes que congrega el observatorio se ha limitado a reunirse dos veces al año para fijar las jornadas de apertura de las grandes superficies comerciales en festivo. El observatorio apenas decide las fechas, puesto que el número de jornadas en las que se permite la apertura está fijado por ley.

El comercio genera un 10% del PIB y da empleo al 11% de la masa laboral

Un técnico del sector apunta que "el observatorio se ha desarrollado en la medida en que han querido potenciarlo los señores comerciantes". La misma fuente apunta que la comisión de ordenación comercial "ha tenido una cierta vida", pero poco más.

El portavoz de una de las asociaciones patronales que participan en el observatorio ofrece otra versión: "La responsabilidad sobre la actividad que desarrolle el Observatorio del Comercio depende del consejero responsable. La exconsejera de Industria y Comercio, por ejemplo, no lo convocó nunca".

También apunta que los representantes de la poderosa patronal de las grandes superficies nunca han tenido interés en promocionar el observatorio porque, al ser un órgano en que están representados todos los segmentos de un sector tan heterogéneo, "siempre pierden las votaciones".

José Correcher, de la Federación de Comercio de CC OO, apunta que "desde el punto de vista laboral, nuestro mayor interés se centra en cuestiones relativas a los horarios y a las jornadas de apertura".

Lo cierto es que el observatorio siempre ha evitado asuntos conflictivos como el control de las rebajas camufladas que ofrecen muchos grandes almacenes.