Alarte: "Los municipios tampoco cobran del Consell"

"Los ayuntamientos tampoco cobran de la Generalitat", afirmó ayer el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, que planteó la necesidad de un calendario de pagos por parte del Ejecutivo que preside Alberto Fabra y, como medida excepcional, que este año 2011 y el que viene "en los programas de subvención que requieren que los ayuntamientos adelanten recursos económicos junto con la Generalitat Valenciana, queden exentos los consistorios, dada la difícil situación por la que están atravesando".

El líder del PSPV-PSOE se lamentó de que "no cobran las empresas que gestionan las residencias, no cobran las constructoras, no cobran los letrados del turno de oficio, no cobran las empresas que prestan servicios para limpiar los hospitales, no cobran los proveedores, no cobran las personas dependientes..., no cobra nadie, y tampoco los ayuntamientos valencianos". Alarte anunció la presentación de una proposición no de ley en las Cortes Valencianas que será debatida a finales de noviembre en la que se reclama el Fondo de Cooperación Municipal, una reivindicación del municipalismo valenciano que se concreta en 350 millones de euros anuales.

"Queremos saber cuál es la deuda real de la Generalitat con los ayuntamientos de la Comunidad Valenciana, además del Fondo de Cooperación Municipal", añadió el dirigente del PSPV-PSOE, que se declaró "profundamente preocupado" por la situación de los ayuntamientos.

"No hay credibilidad"

Por otra parte, la cabeza de lista de la candidatura socialista al Congreso de los Diputados por Valencia, Inmaculada Rodríguez-Piñero, criticó ayer que el Gobierno valenciano no ha tomado medidas de ajuste cuando eran necesarias, sino que ha esperado a un proceso electoral y ahora la situación es "límite" y "no hay credibilidad" para poder obtener los recursos de endeudamiento.

En declaraciones a la agencia Efe, Rodríguez-Piñero reconoció que los socialistas tienen un "escenario complicado", pero defendió que "siempre es posible dar la vuelta a las encuestas". La candidata aseguró que hay razones para convencer a los ciudadanos porque en las elecciones del próximo 20 de noviembre, si al final el voto mayoritario es para el PP, España se convertirá en "un mapa azul" que "ya se está viendo adónde lleva".