Grandes eventos para Molca

Fran Carrasco, presidente y propietario de Grupo Molca, un holding con sede en Valencia especializado en el diseño y producción de grandes eventos culturales, deportivos y empresariales, no duda su respuesta: "Aunque nosotros no tenemos nada que ver con la trama Gürtel y nadie nos ha relacionado nunca con ella, lo que está claro es que este asunto no es bueno ni para los políticos ni para el negocio. Por eso es importante que la justicia ponga a cada uno en su sitio cuanto antes".

La de Molca, que espera "facturar unos seis millones de euros a finales de año", es una historia de éxito que en los últimos tiempos ha sido recompensada con diversos premios en comunicación, interiorismo, publicidad exterior y organización de eventos, lo que "se corresponde con las cuatro divisiones de la compañía que son prueba de que nuestra diversificación ha sido acertada".

Carrasco no ha olvidado las dificultades de los primeros tiempos, cuando, a partir de la empresa transformadora de plásticos de su padre, puso los cimientos de Molca gracias a un importante cliente heredado de la empresa paterna: Coca-Cola. "Para nosotros, conseguir fidelizar a Coca-Cola fue vital. Era una de nuestras estrategias, pero pensábamos que íbamos a tardar algo más en lograrlo". Firmar con Coca-Cola significó acelerar los planes de crecimiento de Molca hacia otro de los que habían de ser sus pilares de negocio: unir deporte y empresa a través del patrocinio.

Si Coca-Cola fue el impulso inicial de Molca, la organización en 2008 de la 32ª edición de la American Cup, celebrada en Valencia, fue su espaldarazo definitivo. Para aquella ocasión, el grupo desarrolló todo un despliegue logístico que incluyó torretas urbanas, señalética, banderolas de indicación de tribunas y asientos, decoraciones, cierre perimetral, desarrollo e implementación de la campaña de marca de la competición... "Fue nuestra primera incursión en la organización de un gran acontecimiento. Resultó un éxito, lo que nos permitió convertirnos en la única empresa española y de las pocas del mundo capaces de gestionar en su totalidad un gran evento de este tipo".

A partir de aquí fueron llegando hitos como la puesta a punto del circuito urbano del Gran Premio de fórmula 1 de Valencia y contratos con Ferrari "con exclusividad para España",

Heineken, Panasonic, Banco Santander,

Repsol, Vodafone, Coca-Cola, Bancaja,

Mapfre, Bayer, CEOE, Federación Española de Fútbol, Valencia, Atlético de Madrid, Campofrío, Ciudad de las Artes y de las Ciencias,

Cortefiel, Generali...

Joven, imaginativo e innovador, Fran Carrasco ha hecho crecer a su empresa a contracorriente de las tendencias del sector. Así, mientras otros subcontratan y externalizan, Molca centraliza sus trabajos, limitando al mínimo la presencia de intermediarios. "Hemos notado que cuando le explicamos a un cliente que podemos proveerle de todo lo que necesita para organizar un evento, aumenta su confianza en nosotros, pues nota que está hablando con alguien que conoce el trabajo que se va a implementar".

Convencidos de que la innovación es arma vital para triunfar en el mercado ("de ahí que tengamos acuerdos con la Universidad y el Politécnico de Valencia, y que en nuestra plantilla haya desde diseñadores gráficos y creativos hasta proyectistas y arquitectos"), Molca apuesta por la responsabilidad corporativa, "pero no queremos que sea algo de cara a la galería, sino dar pasos, aunque sean pequeños. Por ejemplo, con las lonas que retiramos de la calle se hacen bolsos y carteras. Además de dedicar un 5% de lo que recaudamos con ello a una ONG medioambiental, queremos transmitir el mensaje de que a la publicidad se le puede dar otro uso, no tirarla a la basura", dice.

Carrasco piensa que antes de la actual crisis económica hubo una burbuja en el campo de la publicidad y promoción ("se gastaba sin sentido, derrochando") y que, a partir de ahora, las cosas van a cambiar "y mucho" en el sector. Fran y los 47 trabajadores con que cuenta el grupo de empresas están preparándose para los nuevos tiempos.