Fomento limita el uso de una base antiincendios de la Xunta

El Ministerio de Fomento reclamó a la Xunta que deje de utilizar como base permanente para los aviones antiincendios el aeródromo de Beariz, que pese a llevar operando desde 2002, carece de la preceptiva autorización de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, tal y como publicó este periódico el pasado 14 de octubre. La queja partió del Colegio Oficial de Pilotos de Aviación Comercial, quien en una carta a la Consellería de Medio Rural exigió la paralización inmediata de la actividad aeronáutica en esa base irregular.

El ministerio reclama ahora a la Xunta que subsane los aspectos de seguridad, para lo que precisa realizar inversiones. Ese aviso llevó a Medio Rural a denunciar que el ministerio clausura el aeropuerto que usan los aparataos dedicados a extinción en plena oleada de fuegos y aprovechó para difundir los datos de los primeros 19 días de octubre, en que se quemaron 16.930 hectáreas en 1.635 fuegos. Fomento replicó a Medio Rural con otra nota en la que advierte que como Administración está obligado a tramitar las denuncias sobre dichas instalaciones, al tiempo que advirtió de que la infraestructura no ha sido clausurada. De lo contrario, advierte el ministerio, habría sido precintada por la Guardia Civil.

Al cierre de esta edición, la Xunta informó de que seguían activos aunque controlados incendios en O Saviñao, Montederramo, Baltar, Manzaneda, y A Veiga.En su intento por situar el foco sobre "la intencionalidad sin precedentes" que, según la Xunta, está detrás de los incendios de octubre -por más que los partes internos del Gobierno señalen lo contrario-, el presidente, Alberto Núñez Feijóo reclamó en las últimas horas el endurecimiento de las penas contra los pirómanos. Y esa reivindicación abstracta -el PP ni siquiera anunció si la incluirá en su programa electoral- ayer encontró respuesta del ministro de Justicia. Francisco Caamaño replicó a Feijóo que el Código Penal ya castiga con entre 10 y 20 años de cárcel "los delitos intencionados con riesgo para las personas". Añadió que el problema de los incendios no se soluciona endureciendo el Código Penal. No fue el único dirigente socialista que censuró ayer la actitud de Feijóo ante los incendios.

Con un tono medido y reiterando en todo momento que él no culpa del fuego a ningún Gobierno, y que nunca a lo largo de su trayectoria política lo ha hecho, el también candidato al Congreso por A Coruña, Miguel Cortizo, ofreció la cooperación del PSOE a la Xunta, pero criticó aspectos concretos del dispositivo y que Medio Rural "no hubiera previsto un plan B a la retirada progresiva de las cuadrillas" desde finales de septiembre. Aseguró, en cualquier caso, que los partidos deben lograr un pacto para afrontar este difícil problema, se llame como se llame el órgano de coordinación.

El ofrecimiento es similar al que el líder del PSdeG, Pachi Vazquez, llevó a cabo por carta hace dos días y que fue ignorado por el presidente, que declinó de buenas maneras cualquier iniciativa similar a través de otra misiva en el mismo día. El tono de Cortizo fue constructivo hasta que abordó la presencia del superdelegado de la Xunta en Ourense, Rogelio Martínez, en el Bernabéu en plena oleada de fuegos, el pasado martes. El dirigente socialista reclamó entonces al presidente la destitución de Martínez, si de verdad cree que su actitud no fue la correcta. "Claro que si Martínez estaba en el fútbol, el presidente está en Babia y eso no ayuda", concluyó. Algo que también reivindicó el diputado socialista José Manuel Lage Tuñas, quien registró una iniciativa parlamentaria para que el Gobierno ofrezca explicaciones.

También el BNG se aferró a las palabras del presidente, quien el pasado jueves dijo que él no iría al Bernabéu. Su portavoz nacional, Guillerme Vázquez, aseguró que malamente podría acudir cuando Feijóo se encontraba en Buenos Aires. Lo dijó así, pese a que Feijóo regresó de Argentina el lunes, la víspera del Real Madrid-Lyón. Martínez, quien ayer, en una entrevista en La Voz de Galicia, aseguró que "todo el PP sabía que acudiría al partido" del Real Madrid porque no iba a estar él "apagando con la manguera", de momento no solo no se da por aludido sino que ha encontrado cierta comprensión entre sus compañeros de siglas. Empezando por su superior jerárquico como conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda, y a la vez secretario general del PP gallego, quien preguntado por el asunto se quitó de en medio repitiendo que su partido ya había calificado ese viaje como un error.

Despachó con esas pocas palabras el asunto uno de los dirigentes populares que más dimisiones ha reclamado a PSOE y BNG en los últimos años. Como responsable de Presidencia, prefirió quedarse con que la situación en los montes orensanos "ha mejorado gracias a la coordinación y el esfuerzo realizado por todos". Ya por la tarde, el PP acusó a los socialistas de intentar "desgastar a la Xunta utilizando los fuegos" y defendió el dispositivo de la Xunta, incluso ahora que se sabe que tardó en llegar a cada incendio en el pasado fin de semana una media de 78 minutos, 40 más que en la gran oleada de 2006.