La Federación elige a Sevilla para la final de la Davis
La Federación española de tenis (FET) anunció ayer que propondrá a la Internacional (ITF) que la final de la Copa Davis entre España y Argentina se organice en Sevilla del 2 al 4 de diciembre. Según fuentes de la FET, Valencia, que competía con la ciudad andaluza, fue descartada por los federativos por no presentar a tiempo un aval por el canon que se había solicitado para acoger el cruce: un millón de euros más los costes de organización. "Aunque les dimos una moratoria, no consiguieron cumplir, porque las autoridades no respaldaron a la federación local y no apostaron por la final", dijeron desde la FET, cuya decisión recurrió la Federación valenciana "por no ajustarse a derecho".
La Federación Internacional, que tiene que aprobar la elección de Sevilla, no ha recibido aún el cuestionario oficial que le debe enviar la FET, detallando, entre otras cosas, el estadio (La Cartuja), el aforo (25.000 espectadores) y cómo se solucionará la instalación obligatoria de un techo. En 2004, cuando España ganó su segunda Davis en el mismo sitio, se instaló una cubierta que luego desapareció, robada pese a que pesaba más de 100 toneladas. Los organizadores, de ser aprobada la ciudad, alquilarán un techo para recortar gastos.
Inspección de la ITF
Fuentes de la Internacional señalaron que cuatro o cinco miembros de su organización se desplazarán en los próximos días a Sevilla. "Y allí", explicaron; "tendremos que evaluar todos los planos, incluyendo, si es necesario, los de la estructura temporal para el techo". "Eso", añadieron, "podría incluir enseñar esos planos a un arquitecto externo".
La ITF espera decidir en unas dos semanas. Que los federativos conozcan Sevilla del cruce decisivo de 2004, ganado por España frente a Estados Unidos, les predispone positivamente, puesto que recuerdan la capacidad hotelera de la ciudad, el aforo de la pista y la gran cantidad de opciones que ofrece al visitante, pero también les hace rememorar todo lo que consideran mejorable de aquella cita. Así, fuentes de la internacional describen como "una experiencia muy difícil para el público" el primer día de la final de 2004, por lo que interpretaron como falta de personal para controlar las entradas o de baños públicos. "Iremos a Sevilla con una lista de las cosas que fueron mejorables entonces, pero también con una mente abierta. Es una gran ciudad".
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