Los recortes amenazan los servicios municipales de promoción del gallego
La suspensión de ayudas deja a los Ayuntamientos sin fondos para sostenerlos
La suspensión de la convocatoria de las subvenciones de la Xunta para fomentar el gallego en los ayuntamientos ha puesto en alerta a los trabajadores de los Servizos de Normalización Lingüística. Agrupados en la Coordinadora de Traballadores de Normalización Lingüística (CTNL), pidieron la dimisión de Anxo Lorenzo -secretario general de Política Lingüística- tras conocer la decisión. Su presidente, Nel Vidal, asegura que con la denegación de las ayudas se destruirán puestos de trabajo, sobre todo en los municipios menos solventes.
Según datos dados a conocer en los Encontros pola Normalización Lingüística que organiza anualmente el Centro de Documentación Sociolingüística de Galicia, la cifra de municipios que contaban con este departamento a principios de año era de 69. Desde este organismo advierten que los datos pueden variar debido a los servicios Guadiana: aquellos que aparecen o desaparecen según obtengan o no subvención. Algunos ya han desaparecido y otros, sostenidos por distintas ayudas, temen por su futuro.
La Diputación de A Coruña subvenciona 47 de las 69 oficinas
Vidal asegura que solo 27 de los 69 servicios están respaldados por la normativa municipal, lo que significa que el trabajo de técnico de normalización figura en la Relación de Puestos de Trabajo del Ayuntamiento. Algunos son funcionarios, y otros cubren como personal laboral una plaza creada para el servicio, lo que en principio asegura su continuidad. "Aunque tal y como están las cosas, ¿quien sabe?", apunta el presidente de la CTNL. Vidal también se muestra especialmente crítico con la Rede de Dinamización Lingüística lanzada por la Xunta con el fin de agrupar los municipios con este servicio "mientras retira las subvenciones que le permiten existir", denuncia.
La existencia del resto de Servizos depende en buena parte de las subvenciones de la Xunta o de la Diputación de A Coruña, provincia en la que se localizan 47 de los 69 servicios.
El ente provincial creó, durante el mandato anterior (PSdeG y BNG), una línea específica de subvenciones para fomentar la creación y el mantenimiento de los servicios de normalización lingüística. Mediante una partida trianual que se aproximaba al medio millón de euros por ejercicio, la Diputación ofreció 12.000 euros a cada consistorio para contratar a jornada completa a un técnico y 6.000 para media jornada. Con este sistema, los muncipios coruñeses con más de 3.000 habitantes dependían de la Diputación para el sueldo y empleaban las ayudas de la Xunta para desarrollar actividades.
En medio de los recortes en todas las Administraciones y después del cambio político en la institución, los técnicos consultados, con contrato hasta el 31 de diciembre, temen que la Diputación anule las ayudas. Desde el organismo comunican que su intención no es "en ningún caso suprimirlas" aunque advierten que están " a la espera de la redacción de los presupuestos".
La inexistencia de esta línea de financiación se nota en el resto de provincias. En Pontevedra, son 12 los servicios de normalización lingüística operativos -la cuarta parte de los que hay en A Coruña-, ocho de ellos con plaza fija. En este caso, la retirada de ayudas supone, como sucede en Vigo, dejar sin contratar a personal de forma eventual. Otros, como Poio, Valga o A Lama, suspenderán actividades pero sin prescindir de los técnicos, ya que en estos casos son funcionarios con más cometidos. Las más afectadas serán las provincias orientales. Lugo y Ourense no suman 10 municipios con servicio de normalización. En localidades como Vilalba o Barreiros, los técnicos de normalización vivían exclusivamente de las ayudas de la Xunta. En Palas de Rei y O Barco de Valdeorras ya han desaparecido.
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