Blanco propone un pacto por el ritmo inversor en el AVE
La vaguedad de Rajoy con el AVE a Galicia y la insistencia de la Xunta en alertar de que las obras no acabarán hasta 2018 han instalado la idea en el Ministerio de Fomento de que el PP trata de poner la venda antes de la herida. Y aunque oficialmente el PSOE se resiste a dar por perdidas las elecciones, quiere atar el futuro de la alta velocidad con un compromiso claro de los populares, en previsión de que quieran echarle el freno al proyecto. Por eso el ministro José Blanco cerró ayer su larga intervención en el Congreso con la oferta de un acuerdo para que se mantenga el ritmo inversor. De garantizarse, se cumplirá el plazo de finales de 2015, aseguró Blanco.
Durante casi tres horas, Blanco compareció primero y debatió después con los diputados Celso Delgado y Francisco Jorquera, del PP y del BNG, con el AVE gallego, su inversión y sus plazos como único argumento. El ministro de Fomento se reivindicó con la comparativa de lo invertido por su Gobierno, y en especial desde que él está al frente de Fomento, en contraste con las aportaciones de los Ejecutivos del PP. De mantenerse el ritmo inversor, la inauguración de la línea A Coruña-Santiago-Madrid "en torno a finales de 2015" está asegurada. Pero adelantó que no las tiene todas consigo. De ahí que cerrara la sesión con la oferta, dirigida implícitamente al PP, de que se mantendrá la misma aportación de fondos.
Blanco aprovechó su intervención para aclarar una cuestión respecto a la manida expresión "en torno a finales de 2015", que figura en el Pacto do Obradoiro firmado con el presidente de la Xunta en el verano de 2009, y que se repite con insistencia en el debate sobre la finalización de las obras. En la reunión previa que mantuvo con Alberto Núñez Feijóo en el ministerio, reveló, Blanco propuso, a instancias de los técnicos de su departamento, poner la fecha de 2016. "Él me dijo: 'No puedo salir de aquí diciendo que en 2016'. De ahí esa fórmula enigmática de en torno a finales de 2015".
Eje Atlántico
A pesar de este reconocimiento de que el plazo está forzado, Blanco aseguró que todos los proyectos y licitaciones se han ajustado para que el AVE sea una realidad cuando comience 2016. Antes de que eso ocurra, recordó, en diciembre de este año se inaugurará la línea A Coruña-Santiago-Ourense y a finales del próximo, también si no se ralentizan las licitaciones, un tren híbrido diésel-eléctrico unirá Galicia con Madrid en menos de cinco horas, afirmó el ministro.
Mantener el ritmo inversor es también una condición necesaria para que el Eje Atlántico entre A Coruña y Vigo, y concretamente en el tramo pendiente entre Santiago y Vigo, esté listo a finales de 2012. Blanco, que este mismo verano afirmó que las obras no estarían acabadas hasta mediados de 2013, cambió ayer de plazo y afirmó que el único requisito para inaugurar la línea el año próximo es invertir en ella en 2012 tanto como en 2011: 290 millones de euros. "Si el que viene ejecuta lo mismo, se acaba el año que viene", garantizó.
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