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La Xunta no tendrá que devolver 500 millones

La recaudación fiscal en 2010 compensa las liquidaciones negativas de 2008 y 2009

Al final será lo comido por lo servido. Y la buena noticia es que el Gobierno gallego no tendrá que renunciar a los 500 millones de euros que debe devolver en 2012 al Estado como consecuencia de los anticipos a cuenta recibidos del Estado en los años 2008 y 2009. Esa transferencia de fondos que el Ministerio de Economía realiza cada año a las comunidades en función de una estimación sobre los ingresos no tuvo en cuenta el estallido de la crisis y provocó que Galicia recibiera 2.600 millones más de los que le correspondían durante el último año de gestión del bipartito y el primero de la era Feijóo. Un dinero que la Xunta está obligada a devolver en cinco anualidades (el primer plazo abonado este año fue de 114 millones).

Galicia ingresará 422 millones como consecuencia de la subida del IVA
El PSdeG censura el tope de gasto de 9.172 millones para el ejercicio próximo

En 2012 Facenda debería abonar 434 más, pero según anunció ayer su titular, Marta Fernández Currás, esa cantidad se verá compensada por la liquidación de ingresos de 2010 que la Xunta recibirá el año próximo. Según explicó, la conselleira ayer en el hemiciclo, el ejercicio pasado arrojó un resultado favorable a la Xunta de 422,8 millones de euros, como consecuencia de que la recaudación de los impuestos estatales aumentó en Galicia un 25%, frente al 16% que creció en el resto del país. Ese aumento de la recaudación tiene que ver con la decisión del Gobierno central de subir el IVA del 16% al 18%, y el mejor comportamiento de Galicia lo relaciona la Xunta con el efecto del Año Xacobeo.El Gobierno gallego se beneficia ahora de una subida de impuestos en el conjunto del Estado que Feijóo no ha dejado de criticar desde que el Consejo de Ministros aprobó la medida.

Fernández Currás, no obstante, volvió a incidir en los "inadmisibles errores" en el cálculo de los ingresos del Ministerio de Economía y más, subrayó, cuando este departamento disponía de la evolución mes a mes de lo que iba recaudando. Definió como montaña rusa la gestión de los ingresos por parte de la vicepresidenta Elena Salgado y lamentó que la caída de fondos un año y el incremento el ejercicio siguiente "resulta incompatible con la estabilidad que requiere la financiación de la educación, la sanidad y la política social".

No acabaron ahí sus reproches. Lamentó que fruto de la decisión del Gobierno de no transferir los anticipos a cuenta en 2010 que recibirá el año próximo la Xunta tuvo que endeudarse "con el consiguiente coste de oportunidad y de intereses" que conlleva esa operación. Calculó que el coste para la Xunta fue de 600 millones de euros y que lastró la construcción de infraestructuras en un período clave. El anuncio lo hizo la titular de Facenda en su exposición ante el Parlamento del techo de gasto que se autoimpone la Xunta para las cuentas de 2012 y que no podrá sumar más de 9.172 millones de euros, 23 más que los que presupuestó para el presente ejercicio. El instrumento apenas tendrá impacto el año próximo, puesto que el tope que establece por ley es que las cuentas públicas no podrán crecer por encima del PIB cuando este supere el 2,5%.

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El pronóstico de la Xunta apunta a que la economía avanzará un 1,5%, dos décimas más que la española, en 2012 y ni siquiera es definitivo. Ayer mismo Fernández Currás admitió que no descarta revisar el porcentaje anunciado el pasado jueves -cuando el Consello de la Xunta aprobó el techo de gasto- si el Gobierno de España y las instituciones europeas tienen nuevos elementos de análisis. La previsión de que el PIB gallego va a medrar dos décimas más que el del resto del Estado contrasta con los últimos datos conocidos, los del primer semestre de 2011, en que Galicia por primera vez en los últimos años ha crecido menos que el resto de España, (0,6% frente al 0,7% de la media nacional).

La cifra que incluirá el techo de gasto la revalidaron en solitario los 38 diputados del PP. El PSOE, pese a haber votado a favor de la ley dijo estar en contra de los cálculos, que considera poco justificados. El BNG también se opuso porque, según Fernando Blanco, supone consagrar "el neoliberalismo económico por ley", algo que también atribuye a la reforma constitucional. Por su parte el portavoz parlamentario del PP, Pedro Puy, defendió la medida como responsable y transparente, entre citas a Paul Krugmann y al candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Facenda alaba la gestión de Zapatero

Es parte del documento que revalidó el pasado jueves el Consello de la Xunta y que probablemente ni el presidente ni el resto de conselleiros leyeron en profundidad por mucho que lleve el plácet del titular de Presidencia, Alfonso Rueda, en la primera página. El informe financiero plurianual que sirvió de base al Gobierno para calcular el techo de gasto de 2012 contiene un rosario de indefiniciones, errores gramáticales y hasta glosa la gestión de la crisis que hizo Zapatero. Concluye lo contrario de lo que suelen repetir el presidente Feijóo y la conselleira, Marta Fernández Currás, con los micrófonos delante o los argumentarios del PP.

El documento de Facenda determina que en España "durante 2008 y 2009 la política fiscal jugó un papel clave tanto para amortiguar el impacto de la recesión económica y sostener la confianza de los agentes, tanto permitiendo el funcionamiento pleno de los estabilizadores automáticos como adoptando medidas discrecionales en línea con las recomendaciones de la Comisión Europea y de otros organismos internacionales". La cita es textual, incluida la alusión indirecta al Plan E del Gobierno que la diputada socialista María José Caride se encargó de releer en el hemiciclo.

Facenda certifica que en el segundo semestre de 2010 Galicia perdió 12.114 empleos y avisa de que en 2011 el sector de la construcción caerá otro 8% y el de la industria, un 3%. De hecho, su informe señala que el crecimiento de la economía española será igual o inferior a la del resto de España (rompiendo una tendencia que venía de 2006, segundo año de gestión del bipartito) y explica por qué. Apunta que durante los años anteriores a 2008 el principal motor del crecimiento económico fue el sector industrial. Su crecimiento compensó el auge de otros sectores con los que la economía gallega "no puede competir". Esa tendencia se rompió en 2010 cuando el diferencial positivo de dos décimas con el Estado ya no se debió a la industria, que creció menos que la media nacional, sino al Xacobeo. También señala que en 2011 "la economía española posee una ventaja evidente sobre la gallega".

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