"Lo que revela tu grandeza es cómo te enfrentas a la derrota"
Ross Brawn (Manchester, Reino Unido; 1954), abandonó Ferrari en 2006 tras haber logrado siete títulos mundiales, los dos primeros con Benetton (1994 y 1995) y los otros cinco con la marca de Maranello (de 2000 a 2004), todos ellos de la mano de Michael Schumacher. El ingeniero se tomó un año sabático antes de fichar por Honda. Dos años más tarde, el constructor japonés abandonó la F-1. Brawn adquirió la estructura, le puso su nombre y con ella logró su octavo título, en 2009, con Jenson Button. Mercedes le compró el tinglado por más de 200 millones de euros y él, como director, convenció a Schumacher para que volviera a enfundarse el mono.
Pregunta. Nico Rosberg asegura que aprende una barbaridad de usted. Sobre todo, cómo tratar a la gente. ¿Cuáles son sus valores?
"Hacer a una sola persona responsable del triunfo de un equipo no es realista"
"La idea del doble difusor no es mía, sino de un ingeniero japonés"
Respuesta. El compromiso de la gente es importantísimo. Todo el mundo comete errores y yo también. Por eso es vital que, cuando uno la pifia, levante la mano y diga que ha metido la pata. Solo así se podrá analizar por qué ha ocurrido para que no vuelva a pasar. Pero para que alguien tenga el valor de hacer eso tiene que sentirse muy comprometido. Cuando consigues compartir todo eso, entonces, tienes un equipo. Solo conseguiremos nuestro propósito si estamos unidos.
P. ¿Cómo convence a Mercedes para que continúe invirtiendo en su proyecto de fórmula 1?
R. Mercedes sabe perfectamente qué tipo de reto supone competir en la fórmula 1 y por eso quiere demostrar que es capaz de afrontar un desafío de este calibre y tener éxito. Se trata del campeonato más competitivo y complicado que hay de entre las especialidades del motor. Si ganar fuera fácil, ya no sería interesante.
P. ¿Es aceptable para una marca como Mercedes afrontar el Mundial con el monoplaza actual?
R. Es evidente que no estamos donde nos gustaría, pero también sabemos que es imposible contar con un monoplaza que siempre esté delante. Estamos construyendo algo grande y cualquier cosa que merezca la pena lleva su tiempo.
P. ¿Se ha fijado alguna fecha límite para conseguirlo?
R. Solo pretendo ir a mejor cada año y está claro que, en ese sentido, no podemos estar satisfechos porque el curso pasado estábamos en el cuarto lugar y ahora seguimos ahí. El próximo deberíamos pelearnos con los terceros o los segundos y en 2013 luchar por el título. Hay que ir hacia delante y, cuando eso no ocurre, tienes que saber por qué sucede y cambiar de estrategia.
P. Dice que no es posible construir un coche que gane carreras en un solo año, pero lo hizo en 2009 con Brawn GP.
R. En aquella época, el equipo vivió una transición muy importante porque en 2008, en Honda, teníamos cerca de 1.000 personas trabajando en el proyecto de fórmula 1: 758 en Brackley y otras 200 en Japón. El paso de Honda a Brawn GP fue dramático porque nuestros recursos se quedaron en nada, pero eso no afectó demasiado al coche porque ya estaba hecho.
P. El reglamento para 2012 apenas experimentará un par de cambios. ¿Cómo puede afectar eso al campeonato?
R. Si estás ganando, como ahora le ocurre a Red Bull, ese es el escenario que quieres. Que la normativa no cambie cierra la posibilidad de que haya distintas interpretaciones del reglamento. Red Bull irá hacia delante y los demás aún tendremos que ir un poco más allá si queremos plantarles cara.
P. ¿Tiene algo preparado, como ocurrió en el caso del doble difusor?
R. No creo que el año que viene veamos ninguna idea revolucionaria.
P. ¿Cómo nació el doble difusor?
R. La idea no es mía, sino de un ingeniero japonés de Honda. Nos lo presentó, lo analizamos y vimos que era viable.
P. ¿Es Adrian Newey la persona más determinante de la fórmula 1 actual?
R. Adrian acumula grandes éxitos. Su ambición, a nivel técnico, es enorme. Además, es extremadamente competitivo. De todos modos, señalar a una sola persona como responsable del triunfo de un equipo entero no es realista. Cuando formas parte de una escudería, es fascinante comprobar cómo desde fuera todo pude llegar a centrarse alrededor de un individuo cuando, realmente, hay tantísima gente involucrada y que trabaja tanto...
P. ¿Hemos visto ya todo lo que Michael Schumacher puede dar de sí?
R. Las de Spa y Monza [en ambos circuitos fue quinto] han sido sus mejores carreras. Lo único que podemos hacer es proporcionarle un coche ganador. En ese caso hará cosas alucinantes.
P. ¿Se siente en deuda con él por no proporcionarle el retorno que tal vez esperaba y con Rosberg por no ofrecerle un coche que le permita demostrar todo su talento?
R. Me siento en deuda con todo el equipo. Todos estamos frustrados por no haber construido un coche lo suficientemente competitivo todavía. Pero para ello es necesario concebir primero una estructura que te lo permita. Mi ambición por ganar es tan grande como la de los pilotos. Nico y Michael son conscientes de la dificultad que lleva consigo este desafío y no creo que ninguno piense de ese modo porque todos compartimos los fracasos y los éxitos cuando llegan.
P. ¿Cómo digiere las críticas que le caen a Schumacher?
R. Él está disfrutando mucho. Le encanta correr y la gente debería saber que aún no contamos con el coche que nos gustaría. Pero no nos afecta demasiado. Cuando le demos el monoplaza que queremos, la mayoría cambiará rápidamente de opinión.
P. ¿Los discretos resultados de Ferrari y McLaren le ayudan a justificar los de Mercedes?
R. El equipo que manda ahora es Red Bull. Nuestro objetivo es ganar, como también es el de Ferrari y McLaren. Lo que revela tu grandeza es cómo te enfrentas a la derrota para convertirte en la referencia. No existe una escudería que esté satisfecha si no gana.
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