Mary Chapin Carpenter
Cada vez menos campestre y más intimista, la inmensa cantautora de Nueva Jersey aborda la edad madura (52 años) con un disco de historias, confesiones y un sonido tan arropado y elegante que entran ganas de tirar el iPod a la basura. Carpenter recurre menos a los pegadizos ganchos de guitarra eléctrica que frecuentaba antaño, aunque emergen todavía en I put my ring back on o The way I feel. En cambio, su faceta como cronista de emociones, con la voz más cálida y matizada del country-folk, gana enteros: recuerdos de Tiananmen (4 June 1989), viajes juveniles a París (Mrs. Hemingway), los sueños evaporados (I was a bird) y, en general, la sensación de que la edad solo agranda su figura como gran dama.
Mary Chapin Carpenter
The age of miracles
Rounder /Decca
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