Desliz racista en 'Vogue' Italia
Polémica por la descripción en la web de la revista de unos pendientes a los que califican como de "esclava o criolla"
La web de Vogue Italia lleva en su interior la foto de una chica rubia con unos vistosos pendientes en forma de aro. Por debajo, la página está en blanco. Solo parpadea un mensaje de disculpa: "Borramos este artículo para demostrar que no teníamos la más mínima intención de ofender a nadie". El artículo incriminado ha sido tachado de racista porque comentaba así una nueva línea de pendientes: "La joyería siempre ha flirteado con la forma circular, especialmente en los pendientes. Los modelos más clásicos son los estilos de esclava o criolla, caracterizados por un hilo de oro arqueado que atraviesa el lóbulo. Si el nombre evoca las decoraciones tradicionales de las mujeres africanas desembarcadas en América en los tiempos de la esclavitud, su adaptación se mueve en total libertad".
El juego de palabras no ha sentado nada bien en la prensa del sector
El juego de palabras, que coloca una época terrible de la historia en un contexto frívolo, no ha sentado nada bien a la prensa del sector. Los comentarios se ensañaron contra la pieza aparecida en la revista de moda más prestigiosa del mundo y en el país que de las pasarelas extrae parte de su orgullo nacional (y de su PIB).
La falta de tacto demostrada por Vogue Italia no es habitual en una publicación que suele estar pendiente de lo políticamente correcto. En 2008 la revista dedicó un número especial a los modelos y diseñadores de color, desconocidos pero ricos en talento, incidiendo en el tema de la discriminación racial entre focos y pasarelas. El especial tuvo tanto éxito que Condé Nast, la empresa editora, tuvo que imprimir 40.000 ejemplares adicionales.
Sin embargo, hay que recordar que la revista no es inmune a algún que otro resbalón. El de la liberalización de los aros "de esclava" solo es el último. El diario británico The Guardian redactó una lista de tales finezas. Por ejemplo, Vogue Francia sacó a una modelo negra pintada de blanco, y Vogue América retrató como King Kong a LeBron James, jugador -de color- de la NBA.
En la página de la edición italiana queda un comentario solitario de una lectora. Concettina escribe: "En el año de las manifestaciones de las mujeres contra Berlusconi y la falta de respeto en los medios de comunicación de masas, ¿cómo se puede escribir un artículo de este tipo?". La pregunta es retórica. Hasta los más chic meten la pata.
