Austeridad y reproches en Castilla-La Mancha

Ni siquiera dejó pasar los 100 días de cortesía. El Gobierno de Castilla-La Mancha, que dirige la secretaria general del PP, Dolores Cospedal, quiso ayer hacer balance de sus 50 primeros días al frente de la Junta. "Los tiempos no están para esperar hasta los 100 días para adoptar medidas", explicó el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas de la Junta, Jesús Labrador.

El dirigente popular no propuso ninguna medida concreta para atajar la dramática situación económica que atraviesa la comunidad. Prefirió refrescar la memoria y destacar el ahorro que la Junta ha conseguido gracias a su política de austeridad: "Más de 30 millones de euros"

[el 0,3% del presupuesto] tras la supresión de altos cargos y de organismos que, según la Junta, "duplican competencias".

"Este Gobierno no gobierna. Solo hace propaganda", dice el PSOE

Unas decisiones que se adoptaron durante las primeras semanas de vida del nuevo Ejecutivo y a las que el ruido de las constantes denuncias de "falsedad" en las cuentas del anterior Gobierno del socialista José María Barreda, y el cierre patronal de los farmacéuticos el jueves pasado, parecen haber puesto sordina. El Ejecutivo de Cospedal creyó conveniente recordar ayer de nuevo sus primeros logros.

En estos casi dos meses al frente de la Comunidad, Cospedal aún no ha terminado de nombrar a todo su equipo de Gobierno. Hay varias direcciones generales, como la de Protección Ciudadana o la de Dependencia, que aún no tienen a nadie al frente.

Labrador no creyó relevante incluir en su balance el primer cierre de farmacias que ha vivido la comunidad en protesta por el impago por parte de la Junta. Tampoco avanzó soluciones al conflicto. En su lugar, volvió a acusar a Barreda de "dejar vacías" las arcas de la comunidad e insistió en responsabilizarle de los "más de 2.600 millones de déficit" que, según el Ejecutivo regional, arrastra la región.

Aunque la Sindicatura de Cuentas de la Comunidad aún no ha validado esas cifras, el hecho es que el agujero que denuncian casi cuadruplica a los 700 millones reconocidos por Barreda. Sin embargo, la cifra se acerca a los "más de 2.000 millones" que dirigentes del PP insinuaron que debía la Junta antes de tomar posesión. Pese a parecer que los populares estaban prevenidos para lidiar con una situación económica tan crítica, de momento, no han especificado cómo van a conseguir solventar esta difícil coyuntura y demandan una reunión con la ministra de Economía, Elena Salgado, para resolver el problema de déficit de la región.

Otras comunidades del PP, como la balear o la valenciana, hablan de recortes abiertamente. Cospedal, en cambio, ha puesto el foco en una Ley de Emprendedores de la que de momento solo se conoce que existe un borrador, pero nada se sabe sobre su contenido concreto. Se ignora el número de puestos de trabajo que se pretende incentivar o cuánto va a invertir la Junta en su desarrollo y aplicación.

Labrador presumió de la creación de la Oficina de Control Presupuestario para "velar por la eficiencia en el gasto público". En estos primeros días únicamente se nombró a su director pero no se conoce cuántas personas la integran ni su funcionamiento.

El PSOE ve insólito que se haga balance de los 50 primeros días y cree que el gesto evidencia que "este Gobierno, en realidad, no gobierna. Solo hace propaganda y oposición al presidente Barreda, y no ha sido capaz de dar ninguna solución a ningún problema".