Apostar por el campo
En unos momentos tan complicados como los actuales, en los que distintos sectores productivos han dado muestras inequívocas de su agotamiento, es una pena comprobar cómo se está dejando pasar la oportunidad de apostar por las explotaciones agrarias como creadoras de unos puestos de trabajo que estamos perdiendo a millones. Mientras los medios de comunicación se llenan de "primas de riesgo", bonos y demás preocupaciones bursátiles, la agricultura y ganadería de Granada y del resto de Andalucía languidecen empujadas hacia el abismo por decisiones erráticas de las distintas Administraciones públicas y por las dinámicas de un mercado feroz. A una asfixiante presión fiscal se unen unos altos precios de los insumos (gasóleo, abonos...) frente a los bajísimos precios de sus productos en origen, muchas veces por debajo incluso de los costes de producción. Lo peor de todo es que se está dejando perder una apuesta segura por lo nuestro. Y apostar por nuestros campos y sector primario no solo conlleva repercusiones económicas, sino también sociales y culturales.
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