"Siempre que sea legal..."

Asentado este tipo de prácticas con fondos de inversión en otros países, como en Portugal, y hasta que se prohibió en Inglaterra, este boom alcanza ahora a la Liga. "Muchos fondos nos han ofrecido hacer estas operaciones e, incluso, adquirir derechos de algunos de nuestros jóvenes a los que se les puede sacar rentabilidad", desvela Germán de la Cruz, responsable del área deportiva del Espanyol. Desde la comisión mixta de la LFP-AFE aseguran que existe un malestar notorio por el traspaso de Roberto al Zaragoza. Los clubes, sin embargo, y a título personal, aplauden la iniciativa de la entidad maña al entender que es un recurso de agudeza para aliviar el peso económico. Pero todos reclaman que sea una operación limpia. Que esté dentro del plan de saneamiento económico y el fair play financiero que impulsó la UEFA y al que se ha acogido la LFP.

Tener a un jugador caro por un precio más que económico es un caramelo que los clubes españoles ven con buenos ojos. "Los equipos estamos pasando por dificultades económicas y, si el fondo cumple escrupulosamente con la ley, creo que un club puede ayudarse de este tipo de operaciones", señala Vlada Stosic, director deportivo del Betis, club que también está enfrascado en un concurso de acreedores. "Cualquier tipo de financiación que venga de cualquier parte es buena", expone Enrique Cerezo, presidente del Atlético. "No nos parece una mala idea. Es una fórmula para inyectar liquidez en el mundo del fútbol en unos momentos en los que la crisis está pegando fuerte a los equipos", señala Monchi, director deportivo del Sevilla. "Un método válido que nos ayudaría en la situación en la que estamos", admite Felipe Miñambres, director deportivo del Rayo. "Me parece importante buscar fuentes de ingresos distintas de las que genera un club", amplía Juan Carlos Cordero, secretario técnico del Granada. Aunque para Manuel Llorente, presidente del Valencia, hay otras cosas más importantes: "No tengo suficiente información sobre el caso del Zaragoza, pero la aplicación de la Ley Concursal al fútbol perjudica claramente a los clubes que no se acogen a ella y que quieren pagar a sus acreedores".

Para todos los clubes, en cualquier caso, hay un principio básico que no se puede romper. "Tiene que ser legal", aclara Cerezo. "Bien legal", remarca Cordero. "Hay que asegurarse bien de dónde viene el dinero y qué tipo de fondo es al que recurre", explica Stosic. "Es imprescindible que cumpla con los requisitos legales, tanto a nivel de jurisdicción española como europea y que exista una total transparencia en torno a los dueños del fondo y sus inversores", interviene finalmente Monchi.