Mozart sabio y vital

Wolfgang Amadeus Mozart fue un auténtico hombre de teatro. Toda su música explora sentimientos, estados de ánimo, actitudes y conflictos que dibujan los paisajes del alma humana. Tal es la fuerza de su música que, incluso cuando trabajaba con un libreto mediocre, compensaba las debilidades literarias y escénicas con una intuición teatral fuera de serie. Para el director británico John Eliot Gardiner (1943), Mozart es una constante en su trayectoria artística y uno de los pilares de su actividad discográfica: ha grabado más de 250 discos en varias multinacionales y, para no ceder a las presiones del mercado, fundó hace siete años su propio sello, Soli Deo Gloria, donde lleva a cabo sus proyectos con absoluta independencia. Entre sus logros discográficos destacan las siete grandes óperas mozartianas que grabó para Archiv-Produktion entre 1990 y 1995: Idomeneo, El rapto en el serrallo, Las bodas de Fígaro, Don Giovanni, Così Fan Tutte, La clemenza di Tito y La flauta mágica. Su reedición en una caja de 18 discos compactos permite disfrutar las lúcidas versiones de un músico sabio y curioso cuyas opciones interpretativas entierran falsas tradiciones en busca de la pureza estilística. Comprometido con el movimiento historicista, Gardiner fundó en los sesenta el Coro Monteverdi y una orquesta con instrumentos de época que en 1978 adoptó el nombre de English Baroque Soloist. La belleza sonora, la claridad y el virtuosismo que lucen estas dos excepcionales formaciones son la gran baza de estos registros. Los títulos escogidos muestran la evolución del lenguaje musical y teatral de Mozart, desde su primera gran ópera, Idomeneo, rè di Creta, que lleva con audacia al caduco género de la ópera seria a una nueva dimensión formal y expresiva. Curiosamente, Mozart regresaría a este género con La clemenza di Tito, última ópera seria de la historia, estrenada en Praga en 1791, apenas tres meses antes de su muerte. Entre ellas, el genio de Salzburgo impulsa definitivamente la ópera nacional alemana, llevando al singspiel a su máximo esplendor, desde la luminosidad de El rapto en el serrallo a la humanidad de La flauta mágica, y revolucionando el mundo de la ópera bufa con su genial trilogía con el libretista Lorenzo Da Ponte: Le nozze di Figaro, estrenada en el Burgtheater de Viena en 1786; Don Giovanni (Praga, 1787), y Cosí fan tutte (Viena, 1789). Dirigiendo esta última ópera inició Gardiner en 1967, con el Chelsea Opera Group, su idilio mozartiano. Casi tres décadas después, llevó al disco estas siete óperas con la sabiduría que proporciona la experiencia y el rodaje teatral. En el caso de Las bodas de Fígaro asumió incluso la responsabilidad escénica en un montaje filmado en el Théâtre du Châtelet de París (el disco lo grabó en Ferrara). Esa flexibilidad que da la escena se palpa también en las grabaciones de Don Giovanni y La flauta mágica en el festival de Ludwigsburg. Siempre que dirige Mozart, bien sean sus sinfonías, sus conciertos para piano o sus misas, el sentido del canto ilumina sus versiones. El dominio del estilo y la dicción, la expresiva utilización de los recitativos y la elegancia y variedad de matices son factores clave en la recreación de un Mozart lleno de vitalidad, energía y refinamiento.

Mozart Operas. Idomeneo, El rapto en el serrallo, Las bodas de Fígaro, Don Giovanni, Così Fan Tutte, La clemenza di Tito y La flauta mágica. John Eliot Gardiner, director. Archiv Produktion 18 CD