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30 trabajadores de Barreras inician un encierro indefinido

Alrededor de 30 de trabajadores del astillero vigués Hijos de J. Barreras iniciaron ayer un encierro indefinido en las instalaciones de la empresa, para reclamar soluciones a la situación del astillero, que ha iniciado las gestiones para acogerse a la ley concursal. El astillero tiene contrataciones bloqueadas por la suspensión del sistema tax lease y la práctica totalidad de su plantilla afectada por un expediente de regulación de empleo.

Fuentes sindicales consultadas por Europa Press precisaron que la decisión de encerrarse fue tomada en la mañana de ayer de forma "espontánea" por un grupo de trabajadores, aunque no ha sido ratificada ni votada por el comité de empresa. Así, mientras los encerrados ultimaban el "operativo de víveres" para permanecer en las instalaciones del astillero, esperan que "en cuestión de horas" se sumen a la protesta el resto de operarios de la empresa, cuya plantilla ronda los 130 miembros.

Las mismas fuentes mostraron su malestar por la actuación de la dirección de la empresa, y recordaron que el presidente de Barreras, José Francisco González Viñas, se reunió hace una semana con el comité de empresa "y en ningún momento informó de que se iba a ir a un concurso de acreedores".

Por ello, los empleados del astillero exigen a la empresa que "dé explicaciones" de la situación en la que se encuentra la firma, así como las expectativas de resolución del concurso y las consecuencias exactas de la suspensión del sistema de bonificaciones fiscales por parte de la Unión Europea, entre otras.

Asimismo, confirmaron los representantes de los trabajadores que en próximas horas habrá una reunión de los delegados de los tres sindicatos mayoritarios para iniciar el diseño de un calendario conjunto de movilizaciones. "Hay cosas que se arreglan en los despachos", señalaron, en relación con la próxima reunión de miembros del Gobierno y autoridades de la Comisión de Competencia de la UE, y añadieron que "los trabajadores no tienen acceso a los despachos, y lo que tienen que hacer es movilizarse".

La suspensión de la tax lease ha venido a agravar la situación del astillero de Barreras, acuciado por una deuda superior a los 50 millones y con las instalaciones de Bouzas inactivas desde el pasado junio. La factoría tenía un contrato para un buque por encargo de la naviera Armas, pero la paralización del sistema de bonificaciones fiscales ha paralizado su ejecución.

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