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De Granollers a Feliciano

El catalán pierde el dobles con Verdasco tras sustituir a López, reservado para el quinto punto

Suena la banda sonora de Superman en honor de los hermanos Bryan, pero quien levanta el brazo durante la ceremonia como si de su espalda colgara una capa roja es Fernando Verdasco. El que llena el partido de heroicidades, sin embargo, es Marcel Granollers, sustituto de Feliciano López, reservado por si hay que jugar un quinto punto. El exnúmero cinco de dobles hizo primero lo que quiso y luego lo que le dejaron. Los Bryan huyeron de él como de la peste y atacaron a Verdasco en la red (6-7, 6-4, 6-4 y 6-4; 1-2 en la eliminatoria). López lo vio desde el banquillo, en pie, convertido en el líder del equipo. Si David Ferrer no gana a Mardy Fish ("Está a un grandísimo nivel, tenemos esa tranquilidad", dijo Albert Costa, el seleccionador), el toledano cerrará el cruce, salvo sorpresa mayúscula en forma de Verdasco. Un giro copernicano en la vida de un tenista de claroscuros.

"Es por la confianza con la que llega", explica Alberto Berasategui, entrenador del número 31, que desde que está con el vasco solo se ha inclinado ante el serbio Novak Djokovic, Rafael Nadal, el suizo Roger Federer, el británico Andy Murray y el estadounidense Andy Roddick, todos entre los diez mejores. "Se está creyendo que es bueno, que puede estar arriba", añade el técnico. "Si se llega al quinto punto, el recuerdo de su victoria sobre Andy en Wimbledon estará en las dos cabezas".

A los 29 años, López no es solo un tenista nuevo en convencimiento sino en otras cosas. "Cuando ataqué su revés, que es lo que debes hacer en los intercambios largos, sacó buenos tiros", dijo Roddick tras caer en Wimbledon. "No es que tenga mucho revés, pero...", le continuó Mardy Fish tras ceder contra él en Austin. En los últimos tres meses, el toledano ha logrado más pasantes con ese golpe, incluyendo el punto que le dio la victoria contra el número ocho mundial, que en varios años de su carrera juntos.

"Y yo", dice Berasategui; "le digo que es muy difícil pegar un passing de revés cortado, que si llega bien puesto debe intentar tirarlo. Trabajamos los detalles". Un dato pone en perspectiva en qué situación se encuentran los españoles, hasta dónde llevó Feliciano a sus compañeros con su épica victoria del primer día. En toda su larga historia en la competición, los Estados Unidos han arrancado 0-2 una eliminatoria 37 veces y solo la han remontado una (1934).

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